En Neuquén, Argentina, la nieve se cobró nuevas víctimas en los últimos días, luego de que dos hombres caminaran 25 kilómetros en busca de ayuda y murieran congelados cuando les faltaban pocos kilómetros para llegar a un refugio.
Según pudo reconstruir LA NACIÓN a través de fuentes que participaron del rescate, la primera elección de las víctimas, el lugar hacia dónde caminar, comenzó a marcar su trágico final.
► El increíble caso de la madre que encontró a su hija secuestrada hace 24 años por narcos
► Envían a juicio a Cristina Kirchner por causa de millonarios sobornos en Argentina
"Salimos a buscar esta camioneta y nos encontramos también con otra, una VW Amarok, mil metros antes. Si estas personas hubiesen caminado en dirección a Villa Pehuenia en lugar de para Primeros Pinos se hubiesen cruzado con este hombre que estaba solo ahí y que también fue rescatado", explicó uno de los miembros de Gendarmería que participó de la búsqueda tanto ayer como en la madrugada de hoy y esta mañana.
Georgina Oñate, de 32 años, se había quedado dentro de la Toyota Hilux y tras pasar casi un día en el vehículo fue encontrada ayer a la tarde por las fuerzas federales que, minutos antes, habían socorrido al hombre de la Amarok, que también fue trasladado hacia Villa Pehuenia.
Las malas condiciones climáticas presentes sobre la ruta provincial, que tenía acumulación de hielo y nieve, obligaron al uso del Unimog que posee la Gendarmería para poder recorrer el trayecto desde el Paraje Kilka hasta el Paraje Litrán, con apoyo del personal del Grupo Especial de Alta Montaña de la institución.
"A la señora la encontró la Gendarmería, pero los cuerpos de los dos hombres los encontró el Ejército esta mañana. La primera búsqueda se hizo ayer y fue solo la Gendarmería, hasta la madrugada. Hoy se comenzó a las 10 de la manaña la búsqueda de los cuerpos junto con Bomberos, Policía de Villa Pehuenia y Defensa Civil. Mientras hacíamos la recorrida vimos al personal del Ejército que ya había encontrado los cuerpos", explicaron los rescatistas.
Sobre el lugar del hallazgo, detallaron: "Los cuerpos estaban a unos 25 kilómetros de la camioneta y el primer lugar que tenían en ese camino era un depósito de Vialidad Nacional que está a unos 30 kilómetros de donde fue encontrada la camioneta".
Los cuerpos de Francisco Herrera, de 52 años, y Daniel Venegas, de 32, estaban "a dos metros del margen derecho de la Ruta provincial 13, en dirección al paraje Kilka y los Primeros Pinos. Ninguno presentaba signos de haber sufrido violencia ni presentaba, a simple vista, lesiones cortopunzantes".
En cuanto a si se podría haber evitado la tragedia, los especialistas analizaron: "No tenían vehículos preparados para transitar por esa ruta, que estaba cortada. No tenían cadenas para las ruedas ni eran vehículos especiales. Incluso, estaba cortada la circulación y habrían pasado por el costado" del retén.
"Esa ruta estaba cerrada con una barrera, ellos la pasaron y se largaron solos. Es una ruta en la que te ahorrás 60 kilómetros, pero que estaba llena de nieve. Además, hubo importantes vientos", dijo un vocero de la Gendarmería a LA NACIÓN.