:quality(75)/arc-anglerfish-arc2-prod-elcomercio.s3.amazonaws.com/public/4BDOPA2AY5H2BI4F2WU3ADYAG4.jpg)
La embajadora estadounidense Julissa Reynoso está a una semana de dejar Uruguay y podrá decir que cumplió la delicada misión que le encomendó Obama: convencer a Uruguay de recibir a cuatro sirios, un palestino y un tunecino detenidos sin juicio desde 2002 en la base de Guantánamo (ver nota aparte).
La relación con Estados Unidos durante el gobierno de Mujica tuvo puntos altos como la apertura del mercado de ese país a los cítricos uruguayos (negociada durante décadas) o la visita del mandatario a Obama en mayo pasado.
►Lea también Uruguay recibirá a presos de Guantánamo la próxima semana
Pero sin dudas, el hito por el que será recordado este período en la historia de la relación bilateral, es la llegada de los cautivos de Guantánamo que se concretará en la próxima semana luego de un año de complicadas tratativas.
Lo que no está claro es si Estados Unidos accederá al pedido de Mujica para que se libere a Antonio Guerrero, Gerardo Hernández y Ramón Labañino, agentes de inteligencia cubanos detenidos en Estados Unidos desde 1998.
Antonio Guerrero
Gerardo Hernández
Ramón Labañino
Estas tres personas integraban la denominada "Red Avispa" que tenía como misión informar sobre las actividades de la comunidad cubana en el exilio.
Labañino está condenado a cadena perpetua, Guerrero a 22 años y Hernández, líder del grupo, a dos cadenas perpetuas. Los espías son considerados héroes nacionales por el Gobierno cubano. Estados Unidos no dio ningún indicio de que vaya a aceptar el pedido de Mujica.
Tampoco parece viable que acceda a liberar a Óscar López Rivera, militante independentista puertorriqueño. López Rivera, un veterano de la guerra de Vietnam, está preso desde hace más de 32 años y fue condenado a 70 años de prisión por conspiración sediciosa.
Óscar López Rivera
El expresidente estadounidense Bill Clinton le ofreció un indulto en 1999 pero él lo rechazó. Puerto Rico es una isla caribeña que tiene un estatus de "Estado libre asociado" con Estados Unidos desde 1952.
Mujica también pidió a Estados Unidos el cese del embargo de ese país a Cuba que ya lleva medio siglo. El presidente había dicho cuando se comenzó a hablar en marzo de la posibilidad de que llegaran los presos de Guantánamo: "Yo paso factura", en referencia a que iba a pedir algo a cambio.
En su carta a Obama, Mujica se refiere a la tradición de asilo que tiene Uruguay, y señala que "recogiendo de nuestro mejor pasado esa vocación, hemos ofrecido nuestra hospitalidad para seres humanos que sufrían un atroz secuestro en Guantánamo (...) La razón ineludible, es humanitaria".
Sin embargo, en la carta Mujica no hizo ninguna otra referencia específica a la venida de los presos que se concretaría en la noche del lunes o madrugada del martes próximo.
Los presos llegarán en un avión militar a la Base N° 1 y serían trasladados inmediatamente al Hospital Militar. Una vez terminados los tratamientos hospitalarios, se desconoce qué ocurrirá con ellos.
Fuente: GDA/ El País de Uruguay
