Sídney. El primer ministro australiano, Scott Morrison, quien había criticado duramente las declaraciones del presidente turco sobre la matanza de Christchurch, consideró que Recep Tayyip Erdogan demostró después una cierta "moderación".
Las declaraciones de Erdogan sobre el atentado cometido por un australiano en esa ciudad de Nueva Zelanda crearon una controversia y un inicio de crisis diplomática entre los tres países. Pero Morrison elogió un artículo del presidente turco publicado recientemente.
"Se realizaron avances en esta cuestión" y "ya hemos visto una moderación de las opiniones del presidente", declaró el primer ministro australiano, refiriéndose a un artículo en el Washington Post.
Erdogan, quien se encuentra en campaña para las elecciones locales, presentó los atentados en Nueva Zelanda, en los que murieron 50 personas, como un ataque a Turquía y al islam y advirtió a los antimusulmanes de ese país que sufrirán la misma suerte que los soldados de la batalla de Galípoli.
La de Galípoli fue una batalla de la Primera Guerra Mundial en la que los otomanos propinaron una sangrienta derrota a una fuerza aliada integrada básicamente por australianos (que perdieron a 8.000 hombres) y neozelandeses.
En su artículo del Washington Post, Erdogan no reitera esas declaraciones aunque acusa a los países occidentales de permanecer silenciosos ante la islamofobia.
Pero Morrison parece haber visto en este texto una salida a la crisis diplomática en ciernes.
El primer ministro australiano tildó el miércoles de "insensatas", "infames" y "muy ofensivas" las primeras declaraciones de Erdogan. Pidió que las retirara y advirtió que "todas las opciones" estaban sobre la mesa en lo relativo a las relaciones entre Australia y Turquía.
Fuente: AFP