José Luis Patiño Vera, gerente de usuarios de la Superintendecnia Nacional de Servicios de Saneamiento (Sunass), exigió al Gobierno Regional de La Libertad, así como a las autoridades involucradas, acelerar los trabajos de rehabilitación para el abastecimiento de agua potable en la ciudad de Trujillo.
Asimismo, exhortó a los municipios a tener comunicación con los pobladores para que estos no ataquen a los camiones cisternas que distribuyen agua, y respeten el orden de atención para atender a toda la población equitativamente.
Afirmó que esta emergencia, en Trujillo, corresponde a la rotura de una tubería matriz que está a la salida de la planta de tratamiento de agua potable (que abastece al 70% de la ciudad), administrada por el proyecto especial Chavimochic.
Informó, además, que las personas de las zonas altas tienen más problemas para la distribución. "La única forma de abastecerlos es a través de las cisternas porque, debido a la presión, se dificulta atenderlos con los pozos", refirió.
La autoridad aconsejó que si el agua es guardada por un día o más, es necesario clorarla pues tras 24 horas el cloro se evapora. Se está coordinando para que la autoridad de salud reparta pastillas de cloro para evitar enfermedades por el agua guardada.
CONTRADICCIONES
El gerente de Chavimochic, Edilberto Ñique, señaló que la empresa viene realizando los trabajos correspondientes y que recién en la madrugada del viernes se restablecería el servicio agua potable en Trujillo.
Pero, por otro lado, el presidente del directorio de Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de La Libertad (Sedalib), Mario Reyna, afirmó que el problema se resolverá a partir de la próxima semana.
En Trujillo hay una crisis sanitaria porque más de 400 mil personas no tienen servicio de agua potable desde hace seis días. No tienen agua ni siquiera para el aseo personal. Hay colas desde las 2 a.m. esperando camiones cisternas, incluso algunos de estos vehículos han sido abordados violentamente por algunos vecinos en su desesperación de conseguir agua.
Los camiones cisternas abastecedores llegan desde ayer a las zonas de pobreza, tras la exigencia de los vecinos.