Fernando Vivas

La diversificación del delito ha conocido su apogeo con el caso de Iván Siucho (testigo en el Caso Waykis en la Sombra, que reportó al Eficcop un secuestro que develó una presunta red de tráfico de influencias y cohecho que comprometerían a Andrés Hurtado ‘Chibolín’, a la fiscal Elizabeth Peralta y a la ex jefa de Migraciones, Roxana del Águila, por favorecer a comerciantes de oro con cargamentos requisados y a futbolistas con urgencias de nacionalización). Ufff, el paréntesis incluye demasiados golpes de impacto que impiden ver los telones de fondo del gran crimen organizado (la minería ilegal) y de la alta corrupción política (Nicanor Boluarte y su presunta red de procuradores para armar un partido y cobrar cupos por otorgar empleo en el intento). Con distintos acentos, la misma noticia estuvo en todas las portadas, desplazando a cualquier otra; para beneplácito del gobierno y del Congreso.