Consejos de Estado: asesores de los presidentes [INTERACTIVO]

Tras la caída de Alberto Fujimori, los consejeros de Palacio de Gobierno prefieren que no los llamen asesores, quizá porque ese término está asociado a Vladimiro Montesinos, mano derecha del encarcelado ex presidente. A diferencia del ‘Doc’, los hombres de confianza de los mandatarios de los últimos 15 años no operaron en la sombra ni tuvieron poderes paralelos.

“Montesinos estuvo casi oculto, dio la cara después de varios años. Era el hombre detrás del trono, el que tomaba la decisión y que, por momentos, suplantaba al presidente. Es positivo que ahora los asesores den la cara”, afirmó el portavoz alterno de Acción Popular, Víctor Andrés García Belaunde.

Pese a ello, García Belaunde advirtió que los consejeros “debilitan” y “perturban” la relación entre el jefe del Estado y sus ministros. “¿A quién le hace caso el presidente? ¿Al consejero a quien tiene a la mano o a su ministro que despacha con él una vez a la semana?”, cuestionó, para luego indicar que estas figuras no responden ante nadie.

“Los ministros pueden ser interpelados, censurados y hasta denunciados, en cambio el consejero, el asesor no, tiene privilegios sin obligaciones y eso es peligroso”, subrayó.

En diálogo con El Comercio, el consejero palaciego ad honorem Máximo San Román dijo que su labor será solo de “apoyo” al presidente Pedro Pablo Kuczynski (PPK). Aclaró que él no será vocero del gobierno, porque “los ministros son las personas designadas para ello”.

San Román, ex primer vicepresidente de la República, explicó que él actuará en base a los encargos que le dé PPK. Por ejemplo, añadió, el líder de Peruanos por el Kambio ya le encomendó dos tareas puntuales: modernizar los mercados del interior del país y “estudiar y desempolvar” todos los expedientes vinculados al tratamiento de los residuos sólidos y líquidos.

La posición del empresario –que el jueves conoció la oficina que tendrá en Palacio de Gobierno– sobre la situación de Fujimori es clara: está a favor de un eventual arresto domiciliario, pero no de un indulto. “Esa fue la oferta electoral y la mantenemos”, manifestó al ser consultado sobre el consejo que le daría a Kuczynski sobre el pedido de perdón del encarcelado ex mandatario.

—Los otros consejeros—
Ni San Román ni Felipe Ortiz de Zevallos ni el médico Carlos Moreno son los primeros consejeros presidenciales poscaída del fujimorismo. En el gobierno de Ollanta Humala, los más conocidos fueron Eduardo Roy Gates y Adrián Villafuerte. Ambos fueron designados ni bien comenzó la administración nacionalista, pero ninguno llegó al final de esta.

Villafuerte renunció en noviembre del 2013 por su presunta vinculación con el resguardo irregular que recibió el ex operador montesinista Óscar López Meneses de la policía; mientras que Roy Gates dimitió en febrero del 2015 para asumir la defensa de la entonces primera dama Nadine Heredia en un caso de lavado de activos.

En su primera entrevista como consejero, Roy Gates aclaró que su tarea era “brindar asesoría” al presidente en la materia de su especialidad: el derecho. “El ministro de Justicia es el asesor legal del gobierno, pero no existe ninguna incompatibilidad entre el ministro y el asesor legal. Imagínese que el presidente tenga una consulta puntual sobre alguna norma, no va a estar llamando al ministro para que le absuelva esa duda”, subrayó en “Agenda política”.

El ex presidente Alan García tuvo en sus ex ministros a sus principales asesores. Luis Carranza se convirtió en su consejero económico tras dejar el despacho de Economía y Finanzas y Susana Pinilla fue nombrada asesora en inversiones luego de su paso por el Ministerio de la Mujer.

Durante el gobierno de Perú Posible, Alejandro Toledo tuvo al menos diez consejeros. El más polémico fue el abogado César Almeyda, condenado en el 2007 a cuatro años de prisión efectiva por haber ofrecido beneficios judiciales al general Óscar Villanueva, ya fallecido, considerado uno de los cajeros de Montesinos.

Los consejeros presidenciales luego de Montesinos han guardado un perfil bajo, salvo algunas excepciones. San Román y Ortiz de Zevallos tienen la tarea de asesorar a Kuczynski sin interferir con el rol de los ministros.

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