Congreso: ¿Cuál es el ánimo de las bancadas sobre el retorno a la bicameralidad y la reelección parlamentaria?

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Fuentes de la Mesa Directiva, señalaron que el miércoles se abordaría el tema siempre y cuando se tengan los votos requeridos. Además, advirtieron que, ante la invitación al primer ministro, Alberto Otárola, la elección podría postergarse.

Hasta el momento, la propuesta cuenta con el respaldo de al menos 82 legisladores, entre integrantes de siete bancadas y congresistas no agrupados.

Se trata de las agrupaciones Fuerza Popular (22), Renovación Popular (9), Avanza País (9), Somos Perú (5), Avanza País (9), Acción Popular (8), Bloque Magisterial (9) y Alianza para el Progreso (11).

Mientras que Perú Libre (12) mantendrá su postura en contra y los bloques de Perú Bicentenario y Cambio Democrático votarían divididos.

En diálogo con El Comercio, el congresista Alejandro Aguinaga, integrante de la bancada fujimorista adelantó que su bloque votará a favor del retorno a la bicameralidad y reelección parlamentaria. Similar respuesta brindaron Lady Camones (APP), Alejandro Cavero (Avanza País), Jorge Montoya (Renovación Popular), Héctor Valer (Somos Perú), Luis Aragón (Acción Popular) y Edgar Tello (Bloque Magisterial).

Este último afirmó que su bancada acordó respaldar el proyecto de reforma. “Pensando en la democracia, creo que corresponde [...] De eso hay coincidencia con todos [los integrantes del Bloque Magisterial]”, expresó. Como se recuerda, esta agrupación, votó dividida en noviembre del 2023. A favor votaron 5 y en contra se pronunciaron 4.

De los no agrupados, los 8 disidentes de AP también darán luz verde a la iniciativa, así lo señalaron. Maricarmen Alva, José Arriola, Ilich López y Karol Paredes. Los ánimos del congresista Edward Málaga son parecidos,

Intentamos comunicarnos con la bancada de Podemos Perú (9), pero al cierre de esta edición no respondieron. Si mantienen la misma postura de la votación anterior (8 adhesiones de dicho partido), la iniciativa pasaría a contar con el respaldo de 90 legisladores.

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Por su parte, la vocera de Perú Libre, Margot Palacios, dijo que su bancada sostendrá su postura. “Así como en la primera ocasión en contra, ahora también será así”, subrayó.

La congresista Silvana Robles, ex integrante de la agrupación del lápiz, indicó que su voto y el de sus colegas renunciantes iría en la misma línea.

De otro lado, fuentes de Cambio Democrático también indicaron que “por lo menos 7 votarán en contra”. Los ánimos también estarían divididos en Perú Bicentenario, así como en la legislatura anterior, y se estarían reuniendo en bancada horas previas a la votación. Guido Bellido, parlamentario de este bloque, adelantó su posición en contra. Carlos Anderson (no agrupado) tampoco respalda la reforma.

Ánimos en el Congreso sobre la bicameralidad:

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En noviembre del 2023, la propuesta obtuvo 93 votos a favor y con ello dio el primero de dos pasos para que el retorno de la bicameralidad y la reelección parlamentaria sean una realidad. En ese entonces, votaron a favor 22 congresistas de Fuerza Popular, 10 de APP, 9 de Renovación Popular (9), 9 de Avanza País, 8 de Podemos Perú, 7 de Acción Popular, 5 de Somos Perú, 4 de Unidad y Diálogo (bancada dejó de existir por la renuncia de Luis Cordero Jon Tay).

También votaron a favor cinco integrantes del Bloque Magisterial, 2 de Perú Bicentenario y 2 de Cambio Democrático - JPP. Se sumaron, además, 10 congresistas no agrupados. En contra se pronunciaron Perú Libre (8) junto a otro grupo de Cambio Democrático (7), Bloque Magisterial (4) y Perú Bicentenario (2), que también tuvo un voto en abstención. También se opusieron 7 no agrupados.

La propuesta ya había sido votada dos veces en el actual Congreso, en julio del 2022 y junio de este año. Sin embargo, en ningún caso se lograron los 87 votos requeridos para que la reforma se apruebe sin necesidad de que pase por un referéndum. El último intento llegó a 86. Por ello, los impulsores de la propuesta presentaron reconsideraciones que dejaron abierta la posibilidad de que vuelva a ser tratada.

Finalmente, en el tercer intento, sí se logró llegar a los 87 votos e incluso superarlos.

La propuesta fue sustentada en noviembre por Martha Moyano (Fuerza Popular), como presidenta de la Comisión de Constitución. La legisladora aseguró que el cambio no representará mayores gastos para el Estado.

Moyano precisó que el texto que se sometió a votación incluía la reelección en sus cargos de los futuros diputados y senadores. Además, se agregó una disposición complementaria que derogaba el artículo 90 A de la Constitución, el cual prohíbe actualmente la reelección de congresistas.

El documento que se someterá a segunda votación también se establece que “la implementación de las cámaras legislativas se financia con cargo al presupuesto institucional del Congreso de la República, sin que sobrepase el 0,6 % del Presupuesto General del República” y que “las reformas constitucionales comprendidas en esta ley entran en vigor a partir de las próximas elecciones generales”.

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La reforma apunta a un Senado (cámara alta) conformado por un mínimo de 60 integrantes y una Cámara de Diputados (cámara baja) de un mínimo de 130 integrantes.

Para el Senado, se garantiza que se elija a un representante por cada circunscripción electoral, que actualmente son 26 (Lima Metropolitana, Callao y los 24 departamento o regiones). El resto serán elegidos por distrito único electoral nacional. Es decir, serían representantes a nivel nacional y no de una región específica. Actualmente, el presidente, vicepresidentes y representantes del Parlamento Andino son elegidos por distrito único.

La Cámara de Diputados y el Senado tendrán a su propio presidente. La presidencia del Congreso de la República “recae de manera alternada sobre los presidentes de cada cámara”. Ambos cargos son irrenunciables.

Los requisitos para ser diputado son los mismos que existen actualmente para ser congresista: ser peruano de nacimiento, haber cumplido 25 años al momento de la postulación y gozar del derecho de sufragio.

En cambio, para ser senador se requerirá haber cumplido 45 años al momento de la postulación o “haber sido congresista o diputado” previamente, además de gozar del derecho de sufragio. Es decir, si alguien tiene menos de 45 años pero previamente fue congresista, sí podrá postular a senador.

Una novedad que establece la reforma es que los candidatos a la presidencia y vicepresidente también podrán ser candidatos a senador o a diputados. Con las normas actuales, solo los candidatos a la vicepresidencia pueden postular al Congreso.

Los senadores y diputados tendrá el mismo derecho a antejuicio o ‘inmunidad’ por infracción de la Constitución y por todo delito que cometan en el ejercicio de sus funciones y hasta cinco años después de que hayan cesado en éstas. La inmunidad no alcanza a los delitos comunes que cometan, los cuales deberán ser procesados ante la Corte Suprema.

Los diputados serán los que tengan iniciativa para proponer leyes y su cámara será la primera en aprobar un proyecto luego de su paso por las respectivas comisiones o de rechazarlas y mandarlas al archivo. Si se aprueba, el proyecto será enviado al Senado para ser sometido a revisión o modificaciones. Luego, el Senado puede aprobar o modificar la propuesta legislativa remitida por la Cámara de Diputados; o puede rechazarla y mandarla al archivo. Recién luego de que el Senado apruebe el proyecto, este será enviado por el presidente del Congreso al Poder Ejecutivo para su promulgación.

Será ante la Cámara de Diputados que el presidente del Consejo de Ministros deberá presentarse en los 30 días posteriores a su designación “para exponer y debatir la política general del gobierno y las principales medidas que requiere su gestión”. Sin embargo, esa presentación “no da lugar al planteamiento de cuestión de confianza”.

A la Cámara de Diputados también le corresponderá las interpelaciones de ministros y sus eventuales censuras o rechazos a cuestiones de confianza. Es ante esta cámara, además, que el titular de la PCM podrá presentar cuestión de confianza. También podrá citar a gobernadores regionales.

También se establece que es la Cámara de Diputados la que podrá ser disuelta por el presidente en caso se censure o se le niegue la confianza a dos Consejos de Ministros. Luego, de esto se deberá convocar a elecciones solo para la cámara baja para completar el periodo. En cambio, el Senado no podrá ser disuelto.

Otra diferencia es que es la Cámara de Diputados la que podrá iniciar investigaciones “sobre cualquier asunto de interés público” y será obligatorio comparecer ante las citaciones de estas.