La sesión se desarrolló sin los fogonazos políticos usuales en el Congreso, pero el futuro del ministro de Transportes y Comunicaciones, Martín Vizcarra, aún es incierto. El informe de la Contraloría General de la República por la adenda al contrato del aeropuerto de Chinchero, en el Cusco será clave para el futuro del proyecto y, quizás, para la suerte del ministro.
No hubo mayores sobresaltos durante la exposición de Vizcarra, quien respondió las 83 preguntas del pliego interpelatorio en un lapso de tres horas. El tenor se elevó cuando se inició el rol de oradores parlamentarios. Los voceros fujimoristas Lourdes Alcorta y Luis Galarreta se quejaron por las actividades de supuestos troles (cuentas falsas de Twitter) en las redes sociales y por portátiles en el Congreso que –según dijeron– eran del Ministerio de Transportes de Vizcarra.
“Búsquese buenos asesores, porque los que usted tiene son troles, caviares”, dijo Alcorta, quien advirtió que la interpelación no tenía nada que ver con la posibilidad del indulto a Alberto Fujimori.
Las críticas fujimoristas se avivaron cuando el vocero Daniel Salaverry pidió la renuncia de Vizcarra. “Creo que así como no lo acompaña el informe del Ministerio Público, dudo mucho que lo acompañará el informe de la contraloría. Creo que ese informe va a concluir que no se ha respetado la normatividad y antes de que usted se someta a una censura, lo mejor que podría hacer es presentar su carta de renuncia”.
Salaverry dijo esto al aludir la decisión fiscal mediante la cual se ordenó en marzo el allanamiento de las oficinas de Kuntur Wasi, el consorcio que se adjudicó la obra.
Sin embargo, su colega fujimorista Karina Beteta indicó que Salaverry brindó una “opinión personal” y que su bancada aún no había tomado una decisión sobre el futuro del ministro Vizcarra.
Fuentes de la bancada fujimorista indicaron a El Comercio que esperarán aún el informe de la contraloría para tomar una decisión sobre una posible moción de censura a Vizcarra.
El informe de la contraloría no solo es clave para el fujimorismo. “Este debate hubiera sido más rico si hubiéramos tenido el informe de la contraloría”, manifestó el aprista Jorge del Castillo.
Durante su intervención, el ministro señaló que él también está a la espera de los resultados del informe de contraloría.
—Deficiencias heredadas—
La exposición de Vizcarra estuvo centrada en asegurar que las deficiencias del contrato del aeropuerto cusqueño de Chinchero fueron heredadas del gobierno pasado y que no existen irregularidades en la adenda firmada durante su gestión en el Ministerio de Transportes.
Vizcarra insistió en que el Estado prevé ahorrar unos S/90,5 millones a valores presentes con la adenda suscrita en febrero pasado. “La adenda de Chinchero no está ajustada al beneficio del concesionario”, aseveró.
También aclaró que el Estado no ha desembolsado ni un sol, pues la obra se encuentra suspendida hasta la entrega del informe de la contraloría sobre el contrato y la adenda. Este documento será entregado el próximo lunes 22 de mayo.
En distintos momentos de su alocución, el también primer vicepresidente de la República sostuvo que una eventual postergación del proyecto generaría “altos costos sociales y económicos para el Estado debido a que se tendría que volver a iniciar el proceso”.