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La Corte Suprema de Justicia aumentó de 15 a 17 años de prisión efectiva la condena contra el exasesor presidencial Vladimiro Montesinos por el secuestro del empresario Samuel Dyer, ocurrido en julio de 1992.
“[Se declara] nulidad en la sentencia del 12 de octubre de 2017, emitida por la Sala Penal Nacional, en el extremo que le impone a Vladimiro Montesinos Torres (autor mediato) 15 años de pena privativa de libertad; y reformulándola, le impusieron diecisiete años de pena privativa de libertad, compurgada”, dice el documento.
La misma medida se adoptó contra el jefe del SIE Alberto Pinto Cárdenas, a quien se le elevó la condena de cuatro años de prisión suspendida a diez años de prisión efectiva, para lo cual el tribunal pidió realizar el cómputo de la pena.
“[Se declara] nulidad en la propia sentencia, en el extremo que impone a Alberto Segundo Pinto Cárdenas (autor) cuatro años de pena privativa de libertad suspendida por el término de tres años; y reformulándola, le impusieron diez años de pena privativa de libertad, debiendo el tribunal de origen realizar el cómputo de la pena y ordenarse su captura”, dice el fallo.
Cabe indicar que por este caso el expresidente Alberto Fujimori fue condenado a 25 años de prisión. En octubre del 2018 el Poder Judicial anuló el indulto humanitario otorgado por el entonces mandatario Pedro Pablo Kuczynski el 24 de diciembre del 2017.
El 27 de julio de 1992, el empresario fue detenido en las instalaciones del aeropuerto internacional Jorge Chávez por miembros del servicio de inteligencia, dirigido en ese entonces por Vladimiro Montesinos.
Posteriormente fue trasladado hasta las instalaciones del Servicio de Inteligencia del Ejército (SIE), donde quedó internado en el sótano. Tres días después se comunicó sobre su detención y se solicitó su investigación por presuntas actividades subversivas.
El 3 de agosto del mismo año no se encontró nada en su contra, pero Samuel Dyer permaneció privado de su libertad hasta el 5 de agosto de 1992, cuando fugó con la ayuda de personal militar.
