A la salida del entrenamiento del Real Madrid en Sevilla, el futbolista Gareth Bale aprovechó para detener su Audi Q7 3.0 TDI quattro triptronic y firmar autógrafos a la fanaticada que había llegado desde temprano.
En ese momento, una joven se puso delante del auto para sacarle fotos al galés y este tuvo la mala fortuna de atropellarle el pie al avanzar un poco.
"Me he querido pegar para hacerle la foto porque había mucha gente delante y ¡zas!, me ha pasado la rueda por encima. Me molesta un poco, pero n mucho.", declaró Alba, como se llama la chica de Sevilla, tras el atropello de Bale.