Kevin Harvick alcanzó su primer título de la Nascar, tras ganar la Ford EcoBoost 400 en el óvalo de Homestead. El piloto de Stewart-Haas Racing fue el mejor a lo largo de la temporada y demostró esto durante el Chase, donde ganó tres carreras, incluidas las dos últimas.
El triunfo de Harvick se debe en gran medida a una buena estrategia de su equipo que decidió cambiar sus cuatro neumáticos en la bandera amarilla de la vuelta 249 lo cual junto a un par de banderas amarillas le permitió ir superando a sus rivales.
El segundo lugar fue para Ryan Newman, quien acabó segundo en el campeonato, solo un punto por debajo de Harvick. Denny Hamlin y Joey Logano, los otros dos que llegaron con opciones a esta carrera acabaron en la séptima y decimosexta posición.