Desde hace 20 años Jack Puente es uno de los mayores difusores de esa danza callejera llamada break dance. Primero fue ‘bboy’ (bailarín) y luego profesor de las nuevas generaciones. Tal como ocurre en los barrios de gran parte del mundo, los jóvenes de La Victoria sienten atracción por esta disciplina que reúne baile y gimnasia, deporte y arte, y sobre todo canaliza su energía desbordante.
“Te enseña a ser mejor, a competir y a querer emular a esos ‘bboys’ que viajan por el mundo mostrando su talento”, señala el profesor Puente, que forma parte de la única escuela municipal de break dance del Perú, con más de 50 alumnos.
Las clases son gratuitas y han demostrado ser una herramienta de cambio que refuerza la autoestima y aleja de las conductas autodestructivas. “Queremos que en la competencia –que será en abril– el trofeo se quede en casa”, dice. //