World Class en Sao Paulo: un encuentro con los mejores representantes de la coctelería en el mundo

El encuentro más importante de la coctelería mundial sucedió a fines de setiembre en Sao Paulo, Brasil. Con avisos de una ola de calor superada rápidamente por una fuerte lluvia seguida de frío —así de voluble—, nos recibió la ciudad brasilera. La edición número 14 del World Class, organizado por Diageo, congregó a 54 competidores de diversos continentes y a más de mil personas que disfrutaron las contiendas para elegir al mejor ‘bartender’ de todo el mundo.

Fueron cuatro retos intensos, con tiempo limitado y una serie de requerimientos, antes de que los jurados especializados (estrellas de la mixología) eligieran a los 12 más destacados. El último día, la competencia se desarrolló entre estos finalistas, y dio como ganador al canadiense Jacob Martin, coronado como el campeón mundial 2023. A pesar de no haber ganado, Latinoamérica ni Perú pasaron desapercibidos.

La presencia latinoamericana es más fuerte cada año. Esta vez, vimos representantes de Chile, Panamá, Argentina, República Dominicana, Brasil, México, Colombia y, por el Perú, fue Omar López de La Niña. Cada presentación en World Class debe ser un espectáculo. Impecable, comienza la faena según el reto acordado y los ‘bartenders’, simultáneamente, demuestran lo mejor de sí. En su primer reto, Omar hizo dos cócteles con Tanqueray N° TEN, paico, miel de Oxapampa, naranja agria amazónica y, lo más impactante para el público, usó un batán andino.

El segundo reto fue con Johnnie Walker y tuvo que preparar 6 cócteles con 6 perfiles para 6 ocasiones diferentes. El tercero fue de los más interesantes porque marca una tendencia actual en la coctelería: la sostenibilidad y el cero desperdicio. Se usó el tequila Don Julio 1942 para situarse en 2042 e imaginar el cóctel del futuro: “Hice una margarita con vinagre de uvas encurtidas con cáscara de naranja, tequila reposado y lo acompañé con un aire de cáscaras de piñas y sal. También hice una cerveza de baja graduación alcohólica (2,5%) porque el futuro es de consumo responsable y se bebe menos alcohol”.

El cuarto reto fue situarse en los años 70 con la música disco, libertad y diversión. López se siente totalmente satisfecho con su participación en esta experiencia y especialmente por el aliento recibido de la barra peruana (la más entusiasta del campeonato, a todas luces) y de la delegación que lo acompañó, con los principales ‘bartenders’ de Lima. Pero no se quedará quieto. Nos dice que trabajará sus debilidades y volverá a intentar en 2025 sin dejar de apoyar al próximo campeón del Perú. ¿Qué le hace falta a la coctelería peruana para alcanzar el nivel de su gastronomía?

Le preguntamos a Diego Macedo, dueño de Sastrería Martínez y parte de la delegación de Sao Paulo: “Los ojos están puestos en Latinoamérica, y el Perú está andando por un buen camino. La gran despensa de frutas que tenemos se usa mucho en la coctelería y todavía está explorándose. La prensa extranjera se queda alucinada con todos los sabores que existen, se están abriendo bares, lo importante es creérsela, a veces miramos afuera y lo que tenemos es un lujo. Hay camino para avanzar, pero se están dando muy buenos primeros pasos”, afirma Macedo quien acompañó a López en toda la competencia.

Tendencias del globo

World Class es también un espacio para mirar lo que está haciendo el mundo respecto de la coctelería. Tiffanie Barriere, miembro del jurado, nos comentó que la tendencia hacia la sostenibilidad es definitivamente la marca de los últimos años. Usar los residuos de los insumos; por ejemplo, las cáscaras de las frutas, y colocarlas como adorno. Es una buena práctica que evita desperdicios. También destaca que se está pensando en el uso consciente del hielo, teniendo en cuenta que el agua es un recurso limitado. En ese sentido, la coctelería siempre está un paso adelante.

Por otro lado, Santiago Michelis, de Diageo, agrega que “se está bebiendo cada vez más cócteles con menor graduación alcohólica, cócteles más ligeros. Es de alguna manera este concepto de deber, primero en forma más responsable y segundo en forma más saludable, beber menos, pero mejor”. Y apelar a la versatilidad. Dejar de lado la imagen de un whisky intocable y solo ‘on the rocks’ para servirlo de manera más refrescante en vaso largo y en cócteles; lo mismo que el tequila asociado siempre a la fiesta, ahora se pretende, con los tequilas prémium como Don Julio 1942, disfrutarlo en coctelería sin culpas al mezclar y saborearlo pausadamente. El próximo World Class nos traerá más sorpresas que esperamos con un buen cóctel en mano. //

Además…

-Finalistas. Entre los 12 países que clasificaron a la final estuvieron México, Canadá (ganador), EE. UU., Sudáfrica, Corea del Sur, Japón y otros.

-En Lima, un cóctel en promedio llega a costar entre 30 y 35 soles. Las barras más top de la ciudad suelen ofrecer cócteles a partir de los 40 soles en adelante.

-En los 14 años del World Class, han ganado tres mujeres: Bannie Kang (Singapur), Kaitlyn Stewart (Canadá) y Jennifer Le Nechet (Francia) y ningún latinoamericano hasta el momento.

-¿Cómo afecta a la coctelería el alza del limón o su escasez? El ‘bartender’ Luis Flores destaca que el precio se ve de todas maneras alterado: “Los limones no solo son para pisco sour o chilcano. Lo que he visto estos últimos días en Lima es que se están usando limones como el eureka o tahití, cuyos precios también han sido afectados. O se están comprando limones de mala calidad. Con el fenómeno de El Niño pasa lo mismo. No es que suban de precio, sino que no habrá productos, sobre todo, del norte. La caña se verá afectada. Hay que ver la mejor manera para que haya otras alternativas. En la selva están el camu camu, la naranja agria, el limón rugoso y la cidra”.