En lo que podría ser su última medida significativa como director de salud pública en EE.UU., el doctor Vivek Murthy publicó un informe en el que pide un gran cambio cultural en la percepción de las adicciones al alcohol y las drogas.
El reporte, "Enfrentando la adicción en Estados Unidos", detalla el precio que se cobran las adicciones en el país —78 personas mueren al día por sobredosis de opiáceos y 20 millones tienen un trastorno relacionado con el consumo de sustancias— y explica cómo los descubrimientos científicos sobre el cerebro ofrecen esperanzas de recuperación.
Aunque estos hallazgos se han publicado antes, incluso por otras agencias federales, el informe intenta llamar a la acción y cambiar la opinión pública, como ocurrió en 1964 con un histórico reporte del responsable de salud pública sobre el tabaco.
El presidente electo Donald Trump asumirá el cargo en enero, y no está claro si el acceso a tratamiento contra la adicción mejorará o empeorará. Trump y el Congreso dominado por el Partido Republicano han prometido revocar y reemplazar la Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible de Estados Unidos de 2010, que hizo del tratamiento contra las adicciones una prestación sanitaria básica.
En una entrevista el miércoles, Murthy, nombrado por el actual presidente, Barack Obama, dijo que no ha hablado con Trump pero que está deseando trabajar con su gobierno para salvar vidas ampliando el acceso a tratamiento.
"Hemos hecho progresos", dijo Murthy. "¿Cómo mantenemos ese progreso en marcha? Una parte importante es asegurarnos de que la gente tiene cobertura médica".
Associated Press tuvo acceso al reporte antes de su publicación oficial. A continuación, un vistazo a lo que contiene y las primeras reacciones.
MITOS SOBRE LA MEDICACIÓN
El informe del director de salud pública refuta las filosofías que sólo se basan en la abstinencia como poco científicas, y respalda el empleo de fármacos como buprenorfina y metadona, utilizados para tratar la adicción a opiáceos. Eso podría molestar a los seguidores de programas tradicionales de 12 pasos, que ven el empleo de medicamentos como sustituir una adicción por otra.
El tratamiento con medicamentos, o MAT por sus siglas en inglés, para la adicción a opiáceos puede llevar tiempo. "Un estudio sugirió que los individuos que reciben MAT durante menos de tres años son más propensos a recaer que los que siguen el tratamiento tres años o más", señaló el reporte.
INTERVENCIONES DE ESTILO TELEVISIVO
Las intervenciones escenificadas, como las que se ven en televisión, podrían ser contraproducentes. Las confrontaciones planificadas por sorpresa "no han sido comprobadas como una forma eficaz de que la gente se comprometa con un tratamiento", señaló el informe. El problema con esa estrategia, señala el documento, es que puede aumentar la resistencia y atacar a la autoestima del adicto.
ALCOHOLICOS ANÓNIMOS
Alcohólicos Anónimos se fundó en 1935 porque la medicina tradicional no trataba los trastornos relacionados con el alcohol. Eso inició una tradición de separar el tratamiento de las adicciones del resto de la medicina.
El reporte deja espacio a AA y otros servicios de apoyo a la recuperación, señalando que no requieren cobertura sanitaria y son gratuitos, pero también señala que "no son lo mismo que el tratamiento y sólo se han incluido recientemente como parte de un sistema de atención sanitaria".
AA fue felicitada en el documento por su capacidad de adaptación. Indígenas estadounidenses, por ejemplo, han incorporado la espiritualidad de su comunidad y permitido a las familias que asistan a las reuniones. Las investigaciones muestran que AA es "un recurso eficaz de recuperación", concluye el informe.
MÁS IMPUESTOS AL ALCOHOL
El documento apoya las políticas de gravar el alcohol en un apartado sobre métodos de prevención basados en pruebas: "También se ha demostrado que los impuestos más altos al alcohol reducen el consumo de alcohol", señala el texto. Otras políticas respaldadas por estudios son limitar la densidad de comercios que venden alcohol, prohibir las rebajas los domingos y exigir responsabilidades a los bares por servir a menores.
¿QUÉ HAY DE LA MARIHUANA?
El reporte sugiere aprender de las normas sobre el alcohol y el tabaco para determinar qué logra minimizar el daño ante la legalización del consumo de marihuana.
Los votantes de ocho estados han aprobado el consumo de marihuana entre adultos con fines recreativos, y más de dos docenas de estados tienen leyes sobre marihuana con fines médicos. El reporte cita "un creciente número de investigaciones" que indican que las sustancias que contiene la marihuana pueden ayudar con "dolor, náuseas, epilepsia, obesidad, enfermedades debilitantes, adicción, trastornos autoinmunes y otros problemas".
Murthy se mostró a favor de relajar las barreras existentes a los estudios sobre la marihuana, aunque el miércoles señaló que le preocupa que el movimiento a favor de la legalización esté avanzando más deprisa que la investigación. "La marihuana es de hecho adictiva", dijo.
NO ES UN DEFECTO MORAL
La adicción es una enfermedad crónica, no un defecto en el carácter ni un fallo moral, afirma el informe. El estigma y la vergüenza han disuadido a la gente de buscar ayuda y mermado la inversión pública.
En el prefacio del informe, Murthy hizo una llamada a la acción: "Cómo respondamos a la crisis es una prueba moral para Estados Unidos. ¿Somos un país dispuesto a enfrentar una epidemia que causa un gran sufrimiento humano y pérdidas económicas?".
ESTADOS REPUBLICANOS, ESTADOS DEMÓCRATAS
El senador republicano por Ohio Rob Portman, codefensor de una ley bipartisana aprobada este año que crea subvenciones para expandir los programas de tratamiento, expresó su esperanza de que el informe aumente la concienciación sobre el problema.
"Tenemos que cambiar la forma en la que hablamos de la adicción y romper el estigma para ayudar a más estadounidenses que sufren esta enfermedad a recibir el tratamiento y la recuperación que necesitan", dijo Portman.
La adicción debería ser una cuestión bipartisana, afirmó el ex representante demócrata Patrick J. Kennedy, defensor del tratamiento contra las adicciones.
"Esto afecta a todo Estados Unidos, pero afecta mucho al votante de Trump", dijo Kennedy. Estados republicanos como West Virginia, Ohio y Kentucky tienen las mayores tasas de sobredosis, señaló Kennedy. Aprobar leyes que obliguen a las aseguradoras a cubrir el tratamiento de las adicciones será una prueba para la promesa de Trump "de poner a los estadounidenses medios por delante de los intereses corporativos", aseguró Kennedy.
Fuente: AP