Los creadores de Pavlok, un dispositivo dentro de la gama de los wearables, se basaron en teorías psicológicas y sociales del comportamiento para obtener una pulsera que ayude a "programarnos " para hacer ejercicio.
El usuario ingresa ciertos datos en la aplicación que se sincroniza con la pulsera de modo que se guardan sus metas, objetivos y logros. Cuando los planes no se cumplen, como por ejemplo, correr menos de lo estipulado, la pulsera emite una descarga eléctrica suave que recuerda que se debe cumplir con toda la rutina.
Sus creadores afirman que este método - el refuerzo negativo - es efectivo para lograr un cambio de comportamiento, y la adquisición de hábitos cargados de compromiso hacia una sola meta: ejercitarse adecuadamente, a diario y con disciplina.