Colombia, El Tiempo/GDA
Investigadores de la Universidad Manuela Beltrán (Colombia) han creado un sistema de entrenamiento que busca mejorar la precisión, velocidad y técnica de los jugadores profesionales de fútbol.
El laboratorio que recibe el nombre de Comba (Tigre, en lengua muisca) costó 90 millones de pesos( 36 mil dólares), y consta de una pantalla blanca de 9 metros de ancho por 2,1 metros de alto. Sobre la que se proyecta la imagen de un jugador virtual, quien es el que recibe los pases.
Las animaciones son generadas por un motor de videojuegos y proyectadas por tres dispositivos ubicados en la parte trasera de la carpa. En la parte superior del techo, hay dos cámaras de alta definición cuya función es tomar registro de la efectividad y precisión de los pases ejecutados.
Los datos de cada entrenamiento son almacenados en una base datos para facilitar el análisis de las habilidades que se deben perfeccionar.
El laboratorio Compa se complementa con un par de lanzadoras robóticas de balones que reciben instrucciones por medio de software. Estas lanzadoras se pueden programar para arrojar los balones con diferente velocidad, elevación, giro o efecto. Además, disponen de conectividad bluetooth y se pueden controlar desde una aplicación móvil.
El laboratorio está ubicado en las instalaciones de la Universidad en Cajicá, donde se adecuó una carpa de 13 metros de largo por 10 de ancho con piso en césped sintético, y tiene un costo de 80 y 90.000 pesos(36 dólares) la hora de entrenamiento.
“Se adquiere experiencia útil tanto para el desarrollo individual como para el juego colectivo. Es una máquina muy rápida y ayuda a incrementar la velocidad mental. Con esta máquina uno se prepara para controlar el balón en jugadas explosivas”, comenta Jeison Guerrero, jugador beneficiado por este sistema.