Desde hace un tiempo existen ciertas dudas respecto al lanzamiento del iPhone 14. Debido a los efectos del covid en China y los problemas con la cadena de suministros, cabía la posibilidad de que Apple viera retrasada la producción de sus teléfonos inteligentes. Sin embargo, parece que la compañía de la manzana ya tiene cubierto cualquier imprevisto.
Según Ming-Chi Kuo, un analista experto en el ecosistema de Apple, la compañía liderada por Tim Cook ha conseguido diversificar la producción de los componentes que serán parte del nuevo smartphone. Esto es algo que no es muy habitual en la compañía, pero con ello ha logrado que no se tengan previsiones de retraso. El analista asegura, incluso, que se tiene cubierta la demanda de al menos de en unos 90 o 100 millones de unidades (entre los cuatro modelos de iPhone 14 que serán anunciados en septiembre).
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Y esta victoria de Apple ha sido posible en parte gracias Samsung, que –más allá de la rivalidad que puedan tener en el mercado de celulares – es su gran socio comercial. De esta manera, componentes vitales para la fabricación del nuevo iPhone 14 serán suplidos por la empresa surcoreana. Por ejemplo, las nuevas pantallas OLED corrían el riesgo de quedarse a medio camino, tras los problemas que presentó LG Display; no obstante, Samsung ha acudido al rescate para llenar la brecha de suministro.
Apple también ha tenido inconvenientes con su nueva memoria RAM LPDDR5 –que incluirán los modelos Pro–. Para este caso ha recurrido a proveedores adicionales a Samsung, como Hynix o Micron.
No cabe duda que Samsung se ha visto beneficia con los problemas de suministro de Apple. Pero la compañía estadounidense debe estarle bastante agradecida, ya que ahora es muy probable que muestre al mundo su nuevo celular en la misma fecha en la que lo hace todos los años, es decir, en setiembre.
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