El 3 de diciembre al fin descubriremos el gran final, el cual ha sido un éxito total. A continuación haremos un repaso a las siete cosas que se necesita resolver antes del final de la serie.
La muerte del profesor
Estando en primera línea de fuego, cuesta creer que vaya a manejarse lo suficientemente bien como para salir adelante. De hecho, tiene todo el sentido del mundo que incluso llegue a sacrificarse por el bien de la banda.
Además, con él vivo siempre quedará la tentación de organizar otro gran golpe en el futuro por el motivo que se les ocurra. Sin el personaje de Álvaro Morte, eso queda bastante descartado.
Que Río siga vivo y esté libre al final
Todos los episodios de ‘La casa de papel’ en Netflix están motivados por la necesidad de rescatar a Rio en un recurso que me trajo a la mente el caso de ‘Salvar al soldado Ryan’, con muchos soldados sacrificándose para rescatar a una única persona.
Aquí las motivaciones para ello son otras, pero una buena forma de darle sentido a todo lo vivido en la plataforma sería que el personaje interpretado por Miguel Herrán llegue con vida al final de la serie habiendo recuperado su libertad.
La caída de Tamayo
Arturo ya recibió lo suyo y ahora es el turno de la caída en desgracia de Tamayo por todas las libertades que se ha tomado para intentar acabar con la banda. Sea muerto o arrestado, no tendría demasiado sentido que el desenlace de ‘La casa de papel’ se sintiera de forma alguna como una victoria para el coronel del CNI encarnado por Fernando Cayo.
Que la trama de Berlín llegue a alguna parte
El excelente personaje interpretado por Pedro Alonso fallecía al final de la segunda temporada, pero eso no ha impedido que haya seguido apareciendo de forma regular. Ha llegado un punto en el que me ha dado la sensación de lo que ha hecho más por poder seguir contando con Berlín, o Andrés de Fonollosa si así lo prefieres, porque la serie lo necesitara.
Espero que en estos últimos episodios se llegue a alguna parte con ello, aunque sea para que meter en el presente de alguna forma a Patrick Criado en un último gran giro de guion que no sé hasta qué punto funciona.
Final feliz para Denver y Estocolmo
La relación entre Denver y Estocolmo ha sufrido varias grietas durante el robo al Banco de España y me habría sorprendido bastante poco si el personaje de Jaime Lorente hubiese muerto en la primera parte de esta quinta temporada, pero ha llegado un punto en el que creo que tiene que haber un componente muy marcado de final feliz que de paso deje claro que nada más de volver a cometer actos criminales. Que Denver y Estocolmo lleguen vivos al final, se reconcilien completamente y vuelven a ser felices con su fijo.
Que Alicia no pase a formar parte de la banda
Najwa Nimri es una de las grandes bazas de la serie a día de hoy y se ha visto poco menos que obligada a colaborar con la banda. Hasta ahí todo bien, pero que no pase a formar parte de la misma, porque sería un recurso de lo más perezoso. Junto a la caída de Tamayo, lo suyo sería que Alicia quede completamente exonerada y recupere su trabajo como inspectora.
Con otro enfoque a su forma de proceder si se quiere y, obviamente, dejando correr cualquier pista que pueda llevar a atrapar a los miembros de la banda que sobrevivan, pero que cada uno vaya por su parte.
Palermo sacrificándose por la banda
Rodrigo de la Serna ha jugado demasiado a menudo un papel desestabilizante para la banda, hasta el punto de ponerla en peligro en más de una ocasión. Una buena forma de redimirse por completo sería sacrificándose por el bien común, probablemente motivado por su amor hacia Helsinki, aunque no necesariamente para salvar la vida del personaje encarnado por Darko Peric, quien se encuentra en una situación de lo más delicada.
De hecho, la muerte de Helsinki podría funcionar a modo motivante para que Palermo tome una decisión así en una situación límite.