Estas plataformas que parecen salidas de una película de ciencia ficción son las famosas Red Sand Forts que aún permanecen el río Támesis, Gran Bretaña. Fueron construidas en 1943 durante la Segunda Guerra Mundial y ahora podrían convertirse en un hotel de lujo.
Cada una de estas plataformas disponía de cuatro cañones que hicieron posible derribar 22 aviones de guerra nazis, cerca de 30 bombas aéreas y hundir un submarino. Finalmente, el Ministerio de Defensa las retiró de servicio a finales de la década de 1950. En 1960 fueron utilizadas como radios piratas que transmitían rock 'n roll con letras que eran consideradas subidas de tono para las emisoras tradicionales.
La idea de convertirlo en un hotel puede hacerse realidad gracias al estudio Aros Architect, que deberá transformar esta estructura en un moderno resort sin dejar de lado su historia. Actualmente, los turistas utilizan sus instalaciones para pasar una tarde divertida, aunque sin ningún tipo de lujos.