Mayra Zunini
Levantarte en las mañanas, pararte frente al espejo y ver tu pelo como si un huracán hubiese pasado por tu cabeza mientras dormías. Intentar peinarte, que el cepillo se quede a la mitad del camino y luchar por largos minutos para sacarlo de esa «selva». Aplicarte cremas, geles, espumas y todos los productos que ves en el supermercado para que tu melena luzca como recién salida de la peluquería. Evitar, de todas las formas posibles, que te toquen el pelo porque se darán cuenta de que, de tanto producto que te colocaste, tus rizos están tiesos. Finalmente, y luego de pasar por todo esto, te rendiste y decidiste lacearlo porque así te evitarás estos problemas.
El cabello rizado, en definitiva, requiere de mayor cuidado que otros tipos de pelo pues, por ser frágil, seco y propenso a quiebres, tienes que esforzarte para mantener su estructura y forma, y reducir los daños a los que está expuesto por el medio ambiente.
Por ello, y para que luzcas tu cabello rizado al natural y sin problemas, te damos aquí algunos consejos.
1. Lavado no tan frecuente
Norma Reyes, estilista y propietaria de Belleza Negra, indica que el lavado de los rizos no debe ser diario, pues el cloro del agua provoca que se debilite y se ponga poroso. Es recomendable lavarlo de una vez a dos veces por semana.
Otra alternativa, según Sthefany Pozú experta de La Nativa Beauty Shop es la técnica del «Co- Wash», que consiste en utilizar solo acondicionador durante el lavado y aplicarlo de la raíz a la punta. El champú, en este caso, solo se utiliza una vez por semana.
Al momento de secar el pelo, hazlo con un polo o tela para que tus rizos no pierdan la forma, pues las hebras de la toalla producen frizz.
2. Péinalo con paciencia
Si bien es cierto una persona pierde entre 150 a 200 cabellos por día, al peinar el cabello crespo se puede perder más de lo debido, incluso se puede quebrar.
Para evitar esto, antes de peinarte, separa por mechas tu pelo y con un peine de cerdas separadas empieza a desenredar de la mitad hacia abajo y sube poco a poco.
Si es necesario, aplica una crema para peinar o espuma. Esta última ayudará a formar tus rizos, compleméntalo con unas gotitas de silicona si quieres darle brillo.
3. Antes de acostarte
Dormir con el cabello suelto provoca que se enrede más de lo debido. Lo ideal es hacerte una trenza para que al día siguiente sea más sencillo peinarte. También puedes colocar una pañoleta de satén o seda para recoger el pelo, pues según Sthefany Pozú, la tela de la almohada absorbe la poca humedad que tienen los rizos.
4. Una vez a la semana
A diferencia del cabello lacio, Norma Reyes indica que las hebras de este tipo de pelo nacen debilitadas, por lo que requieren de reacondicionamiento constante, que debe realizarse una vez por semana.
No es necesario que gastes demasiado utilizando algunos productos químicos, puedes optar por métodos naturales que son igual de efectivos.
El vinagre de manzana ayuda a controlar el pH del cabello y sella las cutículas. Mezcla dos cucharadas en una taza de agua, para luego colocar en el cabello por 15 minutos, luego lava como de costumbre.
Otra opción es mezclar la mitad de una palta madura, la mitad de un plátano (que esté casi negro) y una taza de mayonesa. Echa la mezcla en tu cabello de la mitad para abajo después del lavado normal y déjalo ahí por una hora. Enjuaga con agua tibia y listo. Esto ayudará a hidratar el cabello.
Los aceites de coco, oliva, almendras o de castor ayudan a reducir la resequedad y evitar el quiebre de las puntas.
Tener cabello rizado no tiene por qué ser una tortura, con 10 minutos diarios de cuidado serán suficientes para que puedan mantener su forma.