Se acerca la época más escandalosa y aterradora del año para nuestras mascotas, y para quienes sufrimos al verlas sufrir también.
Hasta en los distritos más estrictos, Navidad y Año Nuevo suelen recibirse entre champán, abrazos y un arsenal de fuegos artificiales. Mientras tanto, nuestros perros, gatos, aves, etc. tiemblan, se esconden, salen volando o se fugan.
No todos los animales buscan escapar debido al estruendo de los cohetones, es cierto, pero sí la mayoría. También es verdad que no todos se pierden, pero suele pasar que al día siguiente aumenta el número de avisos de ‘SE BUSCA’ y ‘PERDIDO’ en postes, veterinarias, bodegas y redes sociales.
Para prevenir que suceda, a lo largo de los años cientos de campañas se han cansado -y se siguen cansando- de repetirle a los dueños de perros y gatos, principalmente, que por favor identifiquen y registren en sus municipios a sus mascotas, pero por algún motivo no lo hacen.
Intrigados por escuchar algunas respuestas, esta semana nos dimos una vuelta por el parque Mariscal Castilla en Lince para conversar con algunas de las personas que encontramos paseando a sus perros. Esto fue lo que encontramos:
“Ellas sí tienen sus placas con sus nombres y todo, pero las dejé en la casa. Lo que pasa con ellas no es necesario porque me siguen y no se me despegan”, comentó Percy Ghilardi refiriéndose a sus perritas Tuka y Motta, de 11 y 9 años.
Para este residente de Lince sí es importante colocarle a nuestras mascotas una placa, collar bordado, medalla, algo que lleve su nombre y un número de contacto para poder recuperarlos en caso se pierdan, pero le parece más importante criarlos con amor, cariño y libertad, y acostumbrarlos a que no se separen de nuestro lado.
Magaly Castro no comparte esta práctica. Ella nos acompañó a hacer el recorrido junto a su perro Blacky Chu, y si bien está de acuerdo con la parte de criar a nuestras mascotas con amor, cariño y cierto grado de libertad, ella sí toma en cuenta los factores que pueden provocar que un animal se pierda, como una perra en celo, olor a comida, un ruido que los aturda o simplemente curiosidad.
“Yo misma he visto en este parque cómo perros que van sin correa se alejan por ir tras una perra en celo y ni caso le hacen a sus dueños”, comentó Magaly.
Hace 3 años, esta residente de Lince y su esposo adoptaron a Blacky Chu del albergue Amor y Rescate. Luego de ponerle un nombre que hiciera honor a su pelaje, le mandaron a hacer una plaquita de metal en forma de hueso con su nombre impreso a un lado y dos números telefónicos y dirección al otro.
“Hay demasiada falta de educación e información al respecto, pero la verdad es que no hay pretexto que justifique el no identificar a nuestras mascotas. Si no tienes los 20 soles para comprar una plaquita o el dinero para insertarles un microchip, hay otras formas”, señaló Magaly.
“Ahora es el momento pues se viene la temporada de cuetes. Hace dos semanas no más hubo tremenda celebración con fuegos artificiales por el Señor de los Milagros y al día siguiente este parque amaneció con varios afiches pegados en postes pidiendo ayuda para encontrar perros y gatos perdidos que la noche anterior salieron corriendo, asustados por la bulla. Eso encima contribuye con la sobrepoblación de animales callejeros”, agregó.
Machín, Tacu Tacu y Alí fueron otros tres perros que salieron a pasear mientras hacíamos el recorrido por el Mariscal Cáceres. No solo estaban sin algo que los identificara, además andaban sueltos y sin correa. Machín, un perro peruano que tenía bien puesto su polito de algodón, ni siquiera tenía un responsable a la vista. Según algunos residentes, su dueña siempre lo deja salir a pasear solo.
Ronald Rivera es otro vecino que nos encontramos paseando al Labrador de sus tíos. Argos, el perro, sí estaba con correa, pero sin placa ni nada que lo identificara.
“Es esencial identificarlos, eso permite que la mascota esté segura y que el dueño la ubique en caso se escape”, dijo Ronald luego de comentar que Argos sí tiene su placa, pero que la había dejado en casa.
Pocos metros más allá nos encontramos con Fryds Murayari. Él paseaba a Pirri, un perro de raza mixta sobreviviente del famoso huayco de Punta Hermosa, el mismo que arrasó con Evangelina Chamorro y una vaca, entre otros animales, plantas y objetos. El perro tampoco llevaba una placa que lo identificara.
"Yo paseo perros y siempre le hablo a mis clientes de la importancia de identificarlos, pero pocos me hacen caso. En Miraflores hay más consciencia, no tanto por esta zona, menos aún en Chorrillos", señaló Fryds.
Joáo Feijóo Méndez es un adiestrador de animales y bachiller de veterinaria que ayer nos acompañó durante el recorrido. Explicó que el oído de los perros puede ser hasta 40 veces más sensible que el oído humano, motivo por el cual muchos se asustan con los ruidos fuertes y salen corriendo, se refugian, se pierden, sufren accidentes y/o desaparecen para siempre.
“Acá en el distrito mucha gente tiene mascotas y son muy pocos los que llevan una placa con nombre y teléfono. ¿Que pasa? Hay mucha falta de información, poca consciencia y una pobrísima tenencia responsable”, explicó el especialista.
“La mayoría cree que tener un perro es sencillo, se excusan argumentando que es de lo más normal que anden sueltos por ahí pues siempre regresan. No es cierto. Tal vez ocurra en el campo, y eso, pero en la ciudad es distinto. Aquí están expuestos a un mundo diferente, lleno de riesgos y peligros. Por eso es fundamental sacar a pasear a tu perro no solo con correa, sino también con algo que los identifique. Es sencillo y el precio es nada comparado al costo emocional que te puede traer el perderlos para siempre”, añadió Joao.
¿Dónde conseguir placas u otros dispositivos para identificar a tu mascota?
Las clínicas veterinarias o tiendas para mascotas suelen tener una variedad de artículos que te permiten imprimir el nombre de tu mascota y la información de contacto que desees. Pero si quieres obtener un descuento en ese y/u otros productos y servicios para mascotas, otra buena opción es afiliarte a Club WUF, una aplicación móvil creada por la asociación sin fines de lucro WUF. Con esta 'app', demás de disfrutar de varios beneficios, serás parte de una gran comunidad interactiva amante de los animales donde podrás hacer consultas y compartir experiencias con otros usuarios y, de paso, con tu aporte estarás apoyando a cientos de perros sin hogar.
¿Qué es WUF?
WUF es una asociación sin fines de lucro dedicada a la promoción de la adopción, el trabajo de concientización sobre la realidad de los perros en estado de abandono y la ejecución de proyectos que contribuyan a la construcción de un mundo mejor para todos los perros. A través de su portal web, decenas de perros que alguna vez estuvieron desamparados, hoy tienen un hogar.