Es natural que una vagina sana tenga diferentes hongos. Sin embargo, a veces estos aumentan y pueden causar una infección vaginal muy irritante e incómoda para la mujer que lo padece. Por ello, te explicaremos todo lo que debes saber acerca de este tema con la ayuda de la ginecóloga estética, Corina Hidalgo en una entrevista con Bienestar de El Comercio.
Según la experta, las infecciones vaginales aparecen por el crecimiento de bacterias, hongos o parásitos. Esto suele causar mucha picazón alrededor de toda la vulva.
Existen diferentes maneras de contraer una infección vaginal. Respecto de la candidiasis vulvovaginal, Hidalgo explica que esta no es considerada una bacteria de transmisión sexual. Se trata de un desequilibrio en el PH vaginal. Muchas veces esto es producido por el uso constante de prendas que guardan mucho calor como las mallas de gimnasio o depilaciones completas en personas sensibles.
Por otro lado, las enfermedades que siempre se transmiten sexualmente son la gonorrea o la clamidia, y estas producen flujos muy sutiles.
“Es importante saber que por desequilibrios en el PH puedes tener una infección. No necesariamente vas a contagiar a tu pareja, pero hay que considerar que si tenemos relaciones espontáneas aumentamos nuestra riesgos de contraer una Infección de Transmisión Sexual (ITS)”, añade la experta.
¿Cómo sé si padezco una infección?
Hay varias maneras de darnos cuenta que padecemos una infección vaginal:
Interna
La ginecóloga comenta que una mujer puede notar la presencia de bacterias en la vagina principalmente por el flujo aumentado que puede ir acompañado de mal olor, picazón y cambios en la coloración.
- Flujo blanco o transparente: Normalmente no tiene mal olor, es bastante frecuente y grumoso.
- Flujo amarillo verdoso o grisáceo: Tiene un olor muy desagradable. En algunos casos puede relacionarse con parásitos considerados como enfermedades de transmisión sexual.
Externa
La experta explica que si la infección ingresa vía vaginal con gérmenes de transmisión sexual, puede infectar el útero, trompas, ovarios y de no acudir a tiempo el médico, puede aparecer dolor durante las relaciones sexuales, fiebre e incluso abscesos. “Eso se llama enfermedad pélvica inflamatoria o vulva vaginitis”, indica.
Cómo tratar la infección vaginal
Hidalgo explica algunos errores comunes en las pacientes con infecciones vaginales, y cómo solucionarlos.
No automedicarse:
“La gente debe entender que no debe automedicarse, ese es uno de los errores más frecuentes que vemos en la consulta. Es importante observar tanto las características de la vulva como el canal vaginal para ver qué tipos de infecciones se han tenido. De acuerdo a eso se da el tratamiento”, dice.
- Cuando es algo agudo:
Si no han pasado muchos días, se pueden dar tratamientos locales como tabletas vaginales, óvulos o cremas.
- Cuando es algo recurrente:
Si se tienen tres o cuatro infecciones al año, el tratamiento es más prolongado y se involucran pastillas o medicamentos que refuercen el sistema. Las mujeres que poseen infecciones recurrentes deben hacerse estudios, porque probablemente puedan tener una enfermedad no diagnosticada que está exacerbando de estas infecciones”, indica Hidalgo.
No volver a consulta
Tras finalizar el tratamiento y sentirse medianamente bien, es posible volver a tener relaciones y ver nuevamente la aparición de la infección. “No sabemos si fue la primera infección que nunca se curó del todo bien, o pudo haber sido la fricción durante el acto sexual. Todas esas cosas se deben evaluar en la consulta”, finaliza Hidalgo.
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