¿Y si pierdo mi trabajo?
Si acaba de perder su trabajo es muy importante que no trate de conseguir otro inmediatamente, que no haga llamadas innecesarias o que no se comunique con otras personas. Esto podría sonar extraño, pero usted debe esperar hasta que su enojo o amargura se hayan calmado y vea la situación desde otra perspectiva. Es importante esperar hasta que esté realmente preparado.
Perder su trabajo puede haber sido más traumático de lo que usted reconoce aún. Aunque estar sin trabajo temporalmente es parte normal del ciclo laboral, para muchos esa pérdida causa un impacto similar al de la muerte de un familiar cercano. Evalúe todos los aspectos de su situación y trate de pensar calmadamente. No hacerlo significaría salir como una bala de cañón perdida y explotar sobre alguno de sus mejores contactos.
Entonces, ¿qué dirá? ¡Nunca nada negativo, nunca! No relate la desgracia que le ha sucedido. A la gente no le gusta escuchar malas noticias y menos hablar con alguien resentido o amargado, o menos aún, con alguien desleal con su anterior empresa, tenga o no tenga la razón. Mostrarse como víctima no le hace tampoco ningún favor. Hable sobre su interés de hacer un cambio en su carrera y que aprovechará la oportunidad para experimentar algo nuevo.
Sin embargo, existen muchas cosas que se deben hacer mientras se contemplan opciones futuras de carrera. Si su empleador le ha ofrecido un programa de outplacement o recolocación, contacte a su consultor de inmediato. Si no lo tiene, a continuación se citan algunas cosas a hacer y otras que no se deben hacer:• Acepte lo que sucedió y dígaselo primero a su familia, hablando abiertamente con su pareja desde el principio. Usted necesitará su apoyo y ellos necesitarán ayudarlo. Comparta honesta y abiertamente sus sentimientos, ellos querrán ayudarlo. Pero no descargue en ellos sus frustraciones y cólera.
• No diga nada negativo sobre la compañía, su jefe o cualquier otra persona. A pesar que usted tenga toda la razón, aparentará ser una persona hostil y amargada ante las personas que luego podrían ayudarle a conseguir un trabajo. Recuerde que todos quieren relacionarse con personas exitosas y positivas, y no con quienes son percibidos como desleales o resentidos.
• No llame a sus contactos profesionales o de negocios para decirles que necesita un empleo o que le consigan un trabajo. Debe resistir la tentación de empezar a establecer contactos para conseguir trabajo hasta sentirse más calmado. La improvisación no ayuda, sólo quita buenas oportunidades.
• No evite a los demás. Busque a sus amigos aún cuando parezca que lo evitan, ellos podrían sentir que no saben cómo ayudarlo, por lo tanto deles una oportunidad. Explíqueles objetivamente sobre la situación y podrá darse cuenta cuán importante es la gente para usted en este punto de su carrera.
• Actualice su lista de contactos. Haga una lista de amigos, parientes, socios de negocios, ex compañeros de estudios y trabajo, proveedores, competidores, entre otros; todos aquellos que puedan saber de oportunidades escondidas de empleo o puedan darle el nombre de personas que las conozcan. Recuerde incluir en la lista todos aquellos que lo conocen profesionalmente y lo aprecian, indistintamente que ostenten cargos importantes o no.
• Haga una lista de otras organizaciones en las cuales usted pueda estar interesado en trabajar, pero no se comunique con ellas todavía. Empiece a pensar en sus planes de carrera a largo plazo; ya sea en la continuación de la misma profesión, cambio de carrera o educación complementaria.
• No responda a los avisos de empleo hasta que su estrategia, actitud y preparación estén listas. Sin embargo, lea, recorte y guarde los que son de su interés.
• No arregle ni envíe su viejo currículo de hace 5 años. Dentro de su estrategia de recolocación deberá hacer uno nuevo, apropiado para el mercado de trabajo actual. Su nuevo CV no debe tener más de dos páginas e idealmente una, donde no solo relate cronológicamente los cargos y las responsabilidades que tuvo, sino donde describa de manera concisa y vendedora los éxitos y logros que obtuvo, su contribución al resultado. Recuerde que debe sustentar con habilidades y competencias su capacidad para agregar valor.
• No es el momento de salir de vacaciones (aunque sienta que las necesita o que por fin tiene tiempo o para tomárselas), irse de viaje, perderse en trámites administrativos o judiciales, o pintar la casa. Usted tiene un trabajo que hacer y esas cosas pueden esperar.
• Empiece una evaluación financiera personal. Por ejemplo, en vista de la incertidumbre de la situación actual, considere dejar de lado por ahora gastos significativos. Evite la tentación de gastar (artefactos electrodomésticos o de sonido, autos o bienes inmobiliarios constituyen la principal tentación). Más aún, considere las formas de reducir los gastos actuales, pero no someta a su familia a un régimen de pan y agua ya que eso puede contribuir a aumentar el estrés familiar. Haga un flujo de caja familiar, proyéctelo varios meses adelante y haga participar a su familia de él para lograr el compromiso de todos en el plan.
• No invierta su dinero en el primer negocio que aparezca. Sea muy cuidadoso de no caer en la trampa del empresario por reacción a su situación actual o por su normal deseo de querer ahora ser su propio jefe. Sin la adecuada preparación, análisis y estudio a fondo, querer ser empresario de la noche a la mañana puede poner en gran riesgo su carrera, su dinero y su autoestima. Desconfíe de quienes le ofrecen magníficos negocios que requieren de su dinero para triunfar.
Finalmente, cuando tenga dudas, NO haga nada hasta que esté listo. Usted estará sorprendido de la diferencia que hace el estar bien preparado antes de empezar su búsqueda de trabajo. Y cuando la empiece, levántese, vístase y manténgase ocupado en su proceso de búsqueda por lo menos por 8 horas al día, cada día. Buscar un trabajo es una labor de tiempo completo. ¡No se distraiga!