Reseña de Mystifier - 25 Years of Blasphemy and War - Dunkelheit - 2014
Hablar de Mystifier es abordar a uno de los más preclaros representantes del metal underground no solo de Brasil y América Latina, sino del mundo y con ello no lisonjeo ni “paso franela” a nadie. 25 años de carrera son lo suficientemente elocuentes para ello. El trabajo desarrollado por los dirigidos por Armando Beelzeebubth ha alcanzado un sustancial equilibrio entre un sonido que puede ser reconocido como música y mantenerse dentro de los parámetros de lo que se conoce como metal subterráneo.
Oriundos de Bahia, un estado económicamente mucho más pobre que Minas Gerais y menos relacionado con el núcleo del metal más conocido de Brasil (Sepultura, Sarcófago, Chakal, Holocausto, Sextrash, etc), y conformado por personas afrodescendientes (no me acostumbro al término, preferiría decir negros y que nadie se ofendiese, no tiene por qué ser malo usar ese término si se le despoja de su carga racista), resultaron una presencia atípica y fresca en el panorama del metal “under” de fines de los 80 y comienzos de los 90.
El grupo alcanzó el pináculo del reconocimiento de la comunidad headbanger adicta a los sonidos extremos con sus discos Wicca (1992) y Göetia (1993) y a lo largo de los años, con esporádicos lanzamientos, varios cambios de alineación, sucesivas giras (una de los cuales los trajo al Perú hace 2 años) y ningún cambio fundamental en su propuesta sigue enarbolando la bandera del black metal de vena ocultista, abiertamente satánica y explícitamente anticristiana.
Hoy el sello alemán Dunkelheit ha tenido la extraordinaria idea de volver a poner en circulación los tres demos anteriores a sus discos, perfectamente remasterizados en un Digipack de lujo con una notable presentación que está ilustrada por el artista peruano Alan “Corpse”. Se trata de una edición que se echaba en falta debido a la rareza en la actualidad de encontrar dichos lanzamientos y a que el obvio estado del sonido en esas cintas ya se ha deteriorado; un formato digital permite rescatar esos trabajos en una calidad mejorada y con una mayor capacidad de difusión.
Del track 1 al 9 tenemos su primer trabajo Tormenting The Holy Trinity (1989), que expresa su obra más visceral, caótica y extrema. Son evidentes las influencias de Venom y Hellhammer así como la rabia ínsita de unos adolescentes poseídos por el deseo de hacer metal ruidoso y blasfemo con cada nota. Temas como Christian Proscription o The Six Celestial Desires of the Virgin (qué gran título) señalan la vocación de su concepto musical. T.E.A.R. (The Evil Ascension Trinity) (1990) es el Segundo demo y va de los tracks 10 al 12, cuyo sonido es mucho más agudo y cacofónico pero más malevolente, como demuestra largamente The Sign of the Unholy Cross, cuya entrada me hace recordar el tema de Morten, Daemonium Vobiscum. Para cerrar aparece, del track 13 al 19, el tercer demo Aleister Crowley (1991), que como todo sabemos es el nombre del conocido ocultista de principios de siglo y que ha sido una figura muy socorrida dentro de la imaginería del black metal mundial. En este trabajo se percibe un mejor planteamiento en la estructura de los temas, así como una vocación por los títulos enrevesados que los caracterizará en el futuro, An Elizabethan Devil-Worshipper’s Prayer-Book debe ser la expresión más barroca de esto y es un gran medio tiempo. En general es extraordinario oír las voces con esos efectos de eco que pretenden otorgarle una cualidad misteriosa, no lo lograban para nada pero igual quedaban geniales como efecto estético.
Este lanzamiento, además, tiene el tractivo particular para nosotros de que su portada ha sido realizada por el ilustrador peruano Alan Corpse, cuyo trabajo se está haciendo cada vez más conocido. Es un diseño en rojo vino (¿o sangre?) inspirado en la portada de la primera edición de su primer demo, con un cristo crucificado y atormentado por una serpiente colosal y triunfante.
Valioso lanzamiento de Dunkelheit que pone al más seminal Mystifier al alcance de nosotros en una presentación de calidad y sonoramente impecable. Se puede conseguir en el sello mismo por Internet (así lo conseguí yo comprándolo, esto no es publicidad pagada) y el mismo manager del sello me ha dicho que Austral Holocaust tiene la distribución acá en Perú.