El punto de quiebre que necesita tu proyecto de vida
Hoy quiero hablarte sobre un hito importante en tu vida, un momento de decisión que puede significar un giro de 180° en el rumbo de tu destino. ¿Te atreves?
En un artículo anterior te mostré el esquema general de las etapas por las que puede atravesar tu vida mientras evoluciona, pues bien, te muestro nuevamente dicho esquema para tener el contexto adecuado.
Asimismo, te comenté a detalle sobre la zona de estancamiento, una zona peligrosa para tu vida porque aparenta ser provechosa pero que, en realidad, no representa un avance hacia los grandes objetivos de vida que tienes, con el agravante de que darte cuenta de ello no es tan sencillo porque tienes la sensación de estar “ocupado” la mayor parte del tiempo.
El primer paso para mejorar es aceptar que existe una oportunidad, justamente ese es el objetivo de que enseñarte a identificar la zona de estancamiento, hacer que aceptes que tienes cosas por corregir.
¿Qué sigue una vez que la zona de estancamiento ha sido identificada?
Entonces, ya has descubierto que estás en una etapa de estancamiento, el siguiente paso es tomar la decisión de cambiar.
Lo sé, el ser humano por naturaleza es resistente al cambio y no es fácil empezar a hacerlo, es por eso que quiero mostrarte algunos de los beneficios que vas a obtener si es que decides emprender un proceso de mejora personal:
- Vas a tener definidos tus grandes objetivos de vida y visualizar tu largo plazo.
- Vas a poder alinear tus acciones del día a día a lo que quieres lograr a futuro.
- Vas a tener mejores hábitos en tu vida, impactando en tu bienestar físico y mental.
- Vas a poder mejorar en tu organización personal.
- Vas a utilizar mejor tus herramientas digitales y físicas.
- Vas a gestionar mejor tu información.
- Vas a impactar todos los días en tus grandes objetivos de vida, vas a acercarte, poco a poco, a tus sueños.
Haz una revolución integral en tu vida
Como ves, son muchos los beneficios que puedes obtener al implementar un proceso de mejora personal en tu vida, mi recomendación es que optes hacerlo de forma integral, partiendo por un diagnostico personal que te brinde claridad sobre qué atacar con mayor énfasis.
Con la información del diagnóstico como input, luego debes diseñar una hoja de ruta que englobe los diferentes elementos que forman parte de la administración de tu vida, elementos que irás atacando uno a uno pero que van a impactar en tu vida por completo, esto es posible siempre y cuando sigas un método de mejora y no mediante iniciativas aisladas.
Pero de este tema te hablaré en el siguiente artículo, de cómo implementar un proceso de mejora personal a nivel integral.
¿Vamos bien, no?
¡Hasta la próxima!
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