Otras 10: la fiebre de los sábados y el peor terapeuta para tratarla 5/10
Parker Lewis, Kung Fu, Los Magníficos y Los �?ngeles de Charlie. Diez iconos más en nuestro listado de los mejores programas de la televisión.60. Saturday Night Live! (1975-¿2012?)
La fiebre de los sábados por la noche empezó hace más de treinta años con este show de comedia que tiene contrato con la NBC hasta el 2012. Ha sido la principal plataforma de lanzamiento de los comediantes más importantes de Estados Unidos de los últimos tiempos y ha generado más de 10 películas basadas en secuencias del programa, entre las que destacan The Blues Brothers y Wayne’s World. Se reúnen todos los estilos de humor aunque sus parodias cáusticas son posiblemente lo mejor del show.
59. Law & Order (1990-¿?)
Una interesante creación del genial Dick Wolf que presenta las dos partes de las fuerzas de la justicia, la policía y la fiscalía, organizando esfuerzos para encarcelar a los rufianes de Nueva York. La serie muestra la evolución profesional de los personajes casi sin preocuparse por su vida personal, centrándose en argumentos, dilemas y discusiones, a veces de carácter moral, que suelen tener una resolución difícil y una actualidad relativa. Por eso, por más que advierten que los contenidos del programa son ficción, parecen inspirados en casos reales siempre. Casi ningún caso acaba bien lo cual le confiere a la serie un tono amargo. Otros rasgos que la caracterizan son las locaciones (casi todas son reales) y grandes actuaciones hasta en papeles muy menores. Ha tenido o tiene, cuatro franquicias de desigual éxito.
58. Queer as Folk (1999)
Esto es lo que pasó cuando Ellen DeGeneres abrió la puerta del closet dejando en libertad a la comunidad más colorida y desatada de la sociedad contemporánea. Brillantemente escrita y muy explícita visual y sexualmente, sigue la vida de tres homosexuales que no estuvieron ajenos a la controversia. Por ejemplo, uno de los personajes es un chico de 15 años que mantiene relaciones ilegales con un tipo mayor (en ese entonces la edad legal para tener sexo consentido en el Reino Unido era 18 años; ahora es 16). Duró sólo dos temporadas porque según los creadores la historia no daba para más (los ingleses hacen las cosas así, cortas… not my fault). Hay una versión norteamericana de la serie que suavizó el tono, inyectó más sexo, la hizo un tanto más glamorosa y simplificó los personajes de manera brutal. El resultado es mucho más superficial pero igualmente entretenido. Duró cinco temporadas.
57. Los Angeles de Charlie (1976-1981)
Los �?ngeles de Charly eran tres chicas regias que hicieron mucho por liberar, medio en broma, medio en serio, a la mujer de sus obligaciones tradicionales en la cocina. En un capítulo hacían de soldados, en otro, de mecánico de autos, y así, en un desfile que tenía más de fiesta de disfraces y pasarela que de inteligente caracterización. Obedecían a las órdenes de Charlie, una voz que hablaba por un alto parlante cuyo emisor rara vez se dejó ver. De hecho nunca mostró el rostro pero sí la nuca. En el final de la serie apareció con máscara de cirujano. John Bosley, interpretado por David Doyle era el asistente de Charlie y es ampliamente recordado. Farrah Fawcett también.
56. El hombre nuclear (1974-1978)
¿Has escuchado la canción de Daft Punk “Harder, better, faster, stronger”? Pues se refiere al hombre nuclear, una suerte de cyborg que le costó al gobierno norteamericano la bicoca de seis millones de dólares. Reconstruído del cuerpo del astronauta Steve Austin, el hombre más rápido del mundo corría en cámara lenta. Inicialmente concebido para un público adulto -sí, claro- terminó siendo el favorito de los niños, algo que los mismos realizadores explotaron en la serie. Luego tuvo un correlato femenino llamado “La mujer biónica”.
55. Kung Fu (1972-1975)
Bruce Lee fue considerado para interpretar a Kwai Chang Caine, un atribulado monje shaolin que viaja por el lejano oeste buscando a su medio hermano y teniendo como única defensa contra estas temerarias tierras, las artes marciales y la mística oriental. Al final su parte fue interpretada por David Carradine, actuación que lo convirtió en un icono (¿lo vieron en Kill Bill?). La serie tiene entre sus principales méritos esmeradas secuencias de acción, una fotografía en ocasiones memorable, una atmósfera maravillosamente crepuscular y una que otra cita citable como esa que dice “pequeño saltamontes…”. José Feliciano, Harrison Ford, Pat Morita y Jodie Foster fueron algunos de los artistas invitados.
54. Parker Lewis (1990-1993)
Zapatillas Converse. El gordo Kubiak. La hermanita Shelley. El amigo nerd. La directora, femme fatale e histérica Grace Musso. Las camisas y el peinado de Parker Lewis. “Sincronizemos relojes”. La pubertad… Esta serie única conjuga mucho de video clip y más de surrealismo de dibujo animado, integra una avalancha de referencias sutiles a la cultura popular y la política y tiene un planteamiento visual muy innovador para su tiempo.
53. Blanco y Negro (1975-1986)
Una serie que rompió esquemas y colaboró con la integración racial. Un producto constantemente citado y reverenciado por los periodistas culturales. Una frase para la historia: ¿Qué estás hablando Willis? Cuando el programa se canceló, todos empezaron a pasarla mal. Dana Plato se convirtió en actriz porno, fue arrestada por robo armado y murió por una sobredosis a los 34 en 1999; Todd Bridges peleó contra las drogas durante mucho tiempo; Coleman demandó a sus padres y a su manager por robarle y si bien ganó un millón de dólares como consecuencia del juicio se declaró en bancarrota en 1999. Desde entonces ha intentado de todo: desde guardia de seguridad en un mall, hasta candidato a gobernador de California. Como se sabe, el Terminator lo terminó.
52. Los Magnificos (1983-1986)
“En 1972 un tribunal militar condenó a prisión a unos comandos por un crimen que no cometieron. Hoy, aunque el gobierno los busca, si alguien tiene un problema, necesita ayuda y puede localizarlos, tal vez pueda contratar a Los Magnificos”. Así empezaba la serie favorita de todo mundo. Los Magnificos eran este grupo de renegados que constaba de un loco creativo, un gil con mucho acceso, un bravucón con miedo a volar y un estratega que fuma puros -posiblemente Montecristo- que interpretaban algo así como la versión ochentera y televisiva de “Los Siete Samurais”. Una de las series de acción más queridas y con un culto más grande en todo el mundo casi no llega a la segunda temporada porque supuestamente contenía 46 actos violentos por episodio. Felizmente estas acusaciones, sumadas a las de sexismo, no progresaron. Al final, no pudo resistir el embate de MTV y del VHS que distraían la audiencia juvenil que solía seguirlos. Frase célebre: “Me encanta cuando un plan se realiza”. Actualmente se escribe el guión de su adaptación fílmica. Pregunta para los lectores: ¿cuál prefieren, la GMC negra de Mario Barakus o la Mystery Machine de Scooby Doo?
51. Frasier (1993-2004)
El tercer spin off más exitoso de la televisión (después de Los Simpson y Knots Landing) tuvo once temporadas, ganó 37 Emmys y tiene el record de ser la serie que ha ganado más Emmys de forma consecutiva en la categoría mejor serie cómica. Si bien la historia transcurre en Seattle, sólo un episodio se grabó en dicha ciudad. Al final de la serie, Kelsey Grammer había interpretado al Doctor Frasier durante veinte años. No era para menos: el actor se había propuesto hacer que la serie durara por lo menos tantas temporadas como Cheers, la madre del cordero.
…continuará
*Estimados lectores: Desde enero del 2009, el blog “Tv en serie” lo desarrolla Romina Massa. Este post escrito por el anterior blogger, Javier Masías, seguirá en línea pero sin opción de dejar comentarios.