Sobre el ofrecimiento de Internet gratis
Alejandro Toledo quiere ser presidente del Perú una vez más y, como parte de su plan de gobierno, ha ofrecido Internet gratis para todos los peruanos, especialmente para los que viven en zonas rurales.
Inmediatamente, muchos salieron a criticarlo señalando que debería enfocarse más bien en atender la necesidad de servicios básicos (como agua y desagüe) que aún tienen muchos compatriotas. Aunque coincido en que hay requerimientos mucho más urgentes para la población, me parece interesante que el acceso a Internet sea considerado dentro de un plan de gobierno. Sin embargo, en lugar de quedarnos solo en el ofrecimiento debemos ir un poco más allá.
Primero, hay que tener en claro que nada es gratis. Alguien tiene que pagar al proveedor por el servicio. Si será el Estado, se deben explicar las características del servicio (por ejemplo, tiempo de sesión y velocidad de conexión) y cuánto dinero se destinará al pago.
Se habla de instalar antenas satelitales en zonas de difícil acceso. ¿No sería mejor promover la instalación de las antenas de telefonía celular que faltan para tener un mejor servicio? También se habla de continuar con el proyecto del tendido de la red dorsal digital.
Después se menciona una asociación con el Proyecto Loon de Google, que usa globos aerostáticos para rebotar señal 4G LTE hacia zonas alejadas. Pero ese proyecto es para que las operadoras tengan mejor cobertura y puedan ofrecer servicios de pago. ¿Quién asumirá ese costo? ¿El Estado?
Estoy de acuerdo con que estos temas sean considerados en los planes de gobierno. Pero no deben ser ofrecimientos aislados. ¿Para qué necesitamos esa conexión? ¿Qué le permitirá a los ciudadanos? ¿De qué manera aprovecharemos eso como país? Hay que estar atentos.