¿La televisión de hoy sigue siendo tan importante como lo era antes?

Yo soy de la generación que creció viendo televisión. Para mi hijo ese aparato –el televisor- es un aparato prescindible, pero no puede vivir sin YouTube o Netflix. Así como no tener un televisor cerca no era admisible para mí, no tener una tableta o un smartphone a la mano, con conexión a Internet, es impensable para mi hijo. Pero, hoy en día, ¿la televisión sigue siendo tan importante como antes? ¿La TV digital hará la diferencia? ¿El cable tiene los días contados? ¿Internet tendrá la voz cantante en la distribución de contenido audiovisual?

Aunque hoy consumo mucho más contenido “On demand”, a través de YouTube y Netflix, me preocupé cuando me enteré de este anuncio:

No es que vea todas las series que pasan en ese canal. Es más, lo veo muy eventualmente. Pero la sensación de saber que ese poco contenido que me gusta no iba a estar, no me gustaba para nada. Felizmente, la situación entre compañías se normalizó y finalmente ese canal siguió formando parte del servicio de televisión de paga del cual soy consumidor.

Sin embargo, hoy veo que algunos amigos con hijos pequeños manifiestan en redes sociales su malestar por una situación similar. El principal operador de TV por cable local anuncia a sus clientes que  BBC internacional ha dejado de transmitir sus señales Entertainment y CBeebies en todo Latinoamérica. A los padres de hijos pequeños les afecta directamente pues, en el segundo canal en mención se transmiten programas muy interesantes para sus edades. En mi caso personal, de la señal Entertainment consumía El Show de Graham Norton. Muy bueno.

LA OPCIÓN ON DEMAND

Según explica la web Merca2.0, no es una decisión solo para la operadora en cuestión sino para toda la región: “La compañía BBC Worldwide Latin America/US Hispanic anunció que dejará de transmitir las señales de BBC Entertainment, CBeebies y BBC Earth en América Latina en abril del presente año”.

¿Cuál es la razón? De acuerdo a la misma web, responde a una nueva estrategia de la empresa: mejorar sus contenidos Premium, concentrándolos en una plataforma de streaming de videos “on demand”.

Particularmente yo aún no me engancho con eso de bajarme las aplicaciones para ver los contenidos de determinado canal de TV en mi tableta o teléfono. Si quiero ver algún programa, dejo programada la grabación en mi decodificador y luego veo el contenido, cuando tenga tiempo. En mi TV. No en el camino. Pero soy consciente en que mucha gente ya se acostumbró a ir hacia un lugar en particular y depender de un aparato determinado para acceder a un contenido específico.

Fox, HBO y muchas otras cadenas internacionales ya están poniendo su contenido en sus plataformas en línea. En el caso de BBC se ha lanzado con todo a suspender su servicio tercerizando la transmisión, e intentar tener un alcance más global a través de su propia plataforma en línea.

¿Y QUÉ HAY DEL CONTENIDO?

Pero en este punto se me ocurre una pregunta más importante: así como estamos modificando los dispositivos a través de los cuales estamos consumiendo el contenido ¿este contenido se modificará a los nuevos requerimientos del nuevo usuario? Porque hay que ser sinceros. Ya no vemos el contenido en un televisor, lo hacemos en aparatos móviles y portátiles, pero lo que vemos sigue teniendo la misma estructura y los mismos tiempos de siempre.

En el país ya tenemos varios años con la señal digital encima y –si bien aún no se ha dado el apagón analógico- no parece haber cambiado mucho. Sigue siendo claro que, versus la TV abierta el cable o el satélite sigue ganando. Pero ante la infinidad de contenido que estos servicios ofrecen, y del cual solo se consume una porción mínima, la posibilidad de elegir qué y cuándo lo queremos ver gana.  Solo habrá que ver hasta cuándo seguir vendiendo televisores continua siendo un negocio ante las nuevas costumbres de los usuarios.