El Feng Shui no solo rescata lo mejor de la decoración de espacios, sino que también busca que la energía de estos ambientes fluya de manera equilibrada y se vea proyectada en la forma en cómo nos sentimos cuando estamos en nuestro hogar.
Atraer la prosperidad en cada ambiente y mantener un equilibrio constante, son algunos de los propósitos que este milenario método chino tiene como meta, inspirando a más de uno a aplicarlo en la decoración de sus hogares.
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Si estás buscando iniciarte en el Feng Shui, pero aún no sabes por dónde empezar, ten en cuenta los siguientes consejos (tranquilo, son más que sencillos):
1. Despídete del desorden: sabemos que los horarios y tiempos reducidos suelen traer como consecuencia la acumulación de cosas, montañas de ropa, platos sin lavar y pisos empolvados. Sin embargo, será mejor que pienses dos veces antes de continuar en ese camino, pues según el Feng Shui este comportamiento hará que tu energía se estanque, y vaya disminuyendo. ¡Alerta!
2. Un espejo en el comedor: para el Feng Shui uno de los lugares que más representa la abundancia del hogar es el comedor. Por ello, invita a las personas a posicionar un espejo en este ambiente, reflejando la mesa. Así, conseguirán impulsar la fuerza de la abundancia.
3. Los muebles no deben obstruir: la forma en la que coloques los muebles en cualquier parte de tu hogar debe permiten que fluya la energía con naturalidad. No recargues demasiado cada habitación, y más bien deja un espacio prudente entre cada pieza.
4. En el baño, las puertas van cerradas: mantener las puertas de los baños cerradas y la taza del water tapada también es un consejo del Feng Shui, pues este es un sitio donde se da salida a lo que nuestro cuerpo no necesita. Aplicando este tip, evita que la energía negativa se irradie en tu casa.
5. Sin espejos en el dormitorio: si, sabemos que probablemente tengas más de uno, sin embargo, el Feng Shui recomienda no colocarlos nunca reflejando la cama, pues invitaría a que terceras personas se 'metan' en tu relación. Se precavido.