OPINIÓN: "Contigo, Lionel", por Carlos Univazo

CARLOS UNIVAZO @Carlosu67

Vamos a ser claros con Messi: jugó mal la final del sábado, correcto. Lo mata, además, no ser posero como Cristiano, no pegar como Godín, ni llorar pujando como Maradona. Encima tiene una cara de huerfanito desamparado cuando va perdiendo, que es como para ponerlo a vender caramelos en los micros. Lo que quieran, pero echarle la culpa de las desventuras de Argentina, que no gana ni los sorteos de cancha hace 22 años, es bien abusivo.

Le piden que se vaya de la selección, donde la mayoría de quienes lo acompañan son más inútiles que ponerle asientos a una popular. ¿Con qué van a ir al Mundial? ¿Con Higuaín? Que si hubiese nacido en otro país vendría a reforzar equipos peruanos. ¿Con Lavezzi? Que corre cuando debe frenar y frena cuando debe correr. ¿Con Di María? Que se mete dos piques y hay que cruzar los dedos para que solo tenga un desgarro. Los argentinos asumen una conducta autodestructiva, porque aniquilan al único que los puede devolver al éxito como ya lo hizo en una Sub 20 y en unos Juegos Olímpicos. Últimamente no fueron a dos mundiales Sub 20 (2009 y 2013). Volvieron este año, los eliminó Ghana. Es decir, detrás de Messi no hay nada. Quién lo va a reemplazar, ¿el ‘Burrito’ Ortega?

Y claro, viene la eterna comparación con Maradona. Pero Diego jugó también Copas América, por si acaso, y también perdió finales. Y también se le escapó una en casa (cuarto en 1987), como a la ‘Pulga’ hace 4 años, lo que pasa es que hoy la amnesia selectiva es pandémica, hay algunos que piensan que Maradona nació el 85, jugó el Mundial del 86 y al mes se murió. Él tiene tantos o mayores fracasos que Messi. El Mundial del 82 lo jugó ah, y Brasil lo despachó con tres goles; él terminó expulsado. El 90 disputó la final y fue como si no estuviera, anduvo más perdido que Nicola en el Día de la Mujer, acuérdense. En todas las ocasiones citadas, jugaba como Messi el sábado. Ganó una, cierto, ya todos sabemos cómo. Bueno, en el peor de los casos, Messi todavía tiene tiempo para coger las mismas costumbres que él. Paciencia.

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