Hoy cayó eliminada del ATP de Washington, pero la figura de Taylor Townsend sigue generando polémica en el tenis femenino. Esto no solo porque mide 1.65 metros y pesa más de 80 kilos, sino por la situación en la que se encuentra.
Puesto 127 del ránking WTA y este año debutó en Roland Garros (llegó a tercera ronda) y Wimbledon. Sin embargo la Asociación de Tenis de los Estados Unidos (USTA), le indicó que no disputara el US Open, pero ella se inscribió y el USTA le retiró el apoyo económico, según informa el portal Clarín.
Patrick McEnroe, manager de la USTA, dio una explicación: "Nuestra preocupación es su salud a largo plazo", declaró. Pese a ello, Taylor encontró ayuda en la ex tenista Zina Garrison para seguir su entrenamiento.
La propia Serena Williams, número uno de la WTA, criticó la medida. "Las mujeres atletas vienen en todos los tamaños, formas, colores y todo. Creo que se puede ver más que en ningún lado en el circuito de tenis", aseguró.
En julio pasado, Taylor vivió una curiosa situación. Tuvo que jugar sola un partido de dobles, debido a que su pareja se lesionó.