AFIN: solo 71 entidades de los tres niveles de gobierno cuentan con evaluación de riesgos de desastres

La Asociación para el Fomento de la Infraestructura Nacional (AFIN) advirtió que – a propósito de los graves estragos en diversas regiones del país, producto de las intensas lluvias por el ciclón Yaku -, el Estado tiene una baja capacidad de respuesta ante este tipo de desastres.

Esta situación se evidencia con algunas cifras: solo 71 entidades de los tres niveles de gobierno cuentan con evaluación de riesgos de desastres y solo cuatro ministerios (Ambiente, Cultura, Educación y Vivienda) han aprobado normativas y/o metodologías orientadas a la evaluación de riesgos en los servicios públicos, precisó AFIN.

Asimismo, 41 de los 158 Sistemas de Alerta Temprana (SAT), de alcance comunitario, se encuentran inoperativos.

Perú es un país con una variedad de peligros y amenazas de desastres naturales. El calentamiento global incrementa la ocurrencia de estos eventos: las inundaciones por lluvias intensas durante el Fenómeno El Niño (FEN) del 2017 afectó 4 931 km de vías, 57% más que en el FEN de 1997-1998.

LEE TAMBIÉN | Daños en caminos y carreteras causan pérdidas millonarias a la economía del norte del país

“Ante este escenario, necesitamos infraestructura resiliente, por ello es importante que, en cada proyecto, se evalúe un espectro de riesgos potenciales asociados al cambio climático y elegir la mejor estrategia de gestión de riesgos, así como el mecanismo financiero para llevarlo a cabo. La resiliencia de la infraestructura depende en gran parte, además, de su mantenimiento”, señaló la asociación en un comunicado.

El terremoto de Pisco en 2007 dejó daños directos en los sistemas de agua y saneamiento de Cañete, Chincha, Ica y Pisco, relacionados con la recuperación y retorno de operatividad que ascendieron a S/ 77.3 millones, cifra que podría haber sido 5,9 veces menor si las empresas prestadoras de servicios de saneamiento (EPS) hubieran realizado el mantenimiento constante de estos sistemas.

AFIN indicó que entre las principales dificultades para el desarrollo de acciones de gestión de riesgos se encuentra las débiles capacidades del recurso humano en las entidades públicas, principalmente en gobiernos regionales y locales.

El incremento de las lluvias durante la última semana en el norte de país provocó diversos daños a la infraestructura regional. Uno de los más sonados fue la caída del puente Sechín en Casma, Áncash, ocurrida el sábado pasado. Esta situación impide una conexión terrestre entre Lima y ciudades del norte, como Trujillo.

VIDEO RECOMENDADO