Según la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Harvard, la dieta cetogénica, más conocida como ‘keto’, está ganando mucha atención debido a su método de pérdida de peso. Este régimen alimenticio se basa en reducir el consumo de carbohidratos. A pesar de que por más de 50 décadas han existido múltiples dietas ‘low-carb’, la keto llama la atención debido a su excepcional aumento del consumo de grasa, el cual se eleva al 70 u 80%. En ese sentido, es esencial tener en consideración que este régimen puede no ser apto para todas las personas.
De acuerdo con Katy Cántaro, nutricionista y docente de la Escuela de Postgrado UPC, la planificación de un tipo de dieta como esta puede incluir que el nivel de carbohidratos del día se reduzca a tan solo 20 o 25% al día. Incluso, en casos extremos, algunas personas se limitan a consumir menos de 100 gramos diarios. “En la dieta keto, lo que se busca es utilizar la grasa como principal fuente de energía. Esto se debe a que el cuerpo, debido a la ausencia de carbohidratos, inicia un proceso de cetosis y le es mucho más eficiente el uso de grasas”, añadió.
A pesar de su efectividad en algunas personas, la especialista hizo énfasis en que no es un régimen recomendable para todo público. “En primer lugar, tiene que ser implementada por un profesional. Luego, debemos ser consciente de que no debemos abusar de esta dieta, pues puede generar problemas en la salud”, aclaró. Por ello, en Bienestar El Comercio, nos compartió información imprescindible sobre esta dieta que se ha vuelto viral durante los últimos meses.
¿La dieta keto es apta para adolescentes?
Kathy Cántaro hizo hincapié en que la dieta keto no es recomendable para los adolescentes y los púberes. “No está bien que la realicen. Para un régimen de este nivel, la persona necesita una madurez y desarrollo neuronal. Asimismo, podría ir en contra de su proceso de crecimiento”, agregó.
De la misma manera, recalcó que, si un adolescente decide seguir esta dieta, puede volverse mucho más proclive a padecer de problemas de salud. Además, resaltó que, a esa edad, se necesitan muchos más carbohidratos para el desarrollo neuronal adecuado, elemento que la dieta keto limita rotundamente.
“Es importante, sobre todo a esa edad, le recordemos a nuestros hijos que tener un organismo saludable no es dejar de comer, sino un plan completo de cambio de hábitos. Se debe incrementar el ejercicio, cumplir con nuestros requerimientos nutricionales y mejorar nuestra rutina de sueño”, indicó la nutricionista.
¿El régimen keto es favorable para todos?
Para empezar, Cántaro mencionó que es vital que la persona sea mayor de 18 años y no cuente con antecedentes patológicos. Esto se debe a que, en esta dieta, se utiliza la reducción de carbohidratos para perder peso. Para reemplazar la ausencia de este elemento, se aumenta el consumo de grasas y no necesariamente son ‘grasas buenas’.
En esa línea, es preciso acentuar que, en personas con dislipidemias, condiciones metabólicas o enfermedades cardíacas, como la hipertensión, este consumo excesivo de grasas puede empeorar su salud o derivar a complicaciones nuevas. “Puede tomarse como una estrategia para reducir nuestra masa corporal, pero no es apta para todos. Es mejor que la persona que desee practicarla cuente con un buen record sanguíneo y metabólico”, estableció la docente.
La dieta cetogénica, al eliminar los depósitos de carbohidratos en el cuerpo, también elimina los líquidos del mismo. Por ende, puede generar una especie de ‘bajón’, el cual no es sostenible con el tiempo. Incluso, puede tener un efecto rebote. No obstante, puede ser compatible con personas físicamente activas, pero que no se dediquen enteramente al fitness.
Para finalizar, la experta recalcó que todo régimen alimentario debe ser asesorado por un profesional. Si una persona no está bien informada, puede disminuir los carbohidratos a niveles que no son sanos. “Si alguien reduce el consumo de carbohidratos a menos de 20% diarios, puede terminar padeciendo de dolores de cabeza, percepción de cansancio, estreñimiento, entre otros efectos”, concluyó.