FERNANDO GONZÁLEZ OLAECHEA (@fernando_got )
La Policía Antidrogas investiga otros envíos de cocaína a Estados Unidos de parte del Clan Cerbellón, cuyos miembros fueron detenidos el pasado jueves en La Molina con 626 kilos de cocaína.
El coronel PNP César Augusto Arévalo Guzmán, de la Dirección Antidrogas (Dirandro), señaló ayer que tienen información sobre cuatro envíos realizados en los últimos 10 meses, en los que habrían sacado del país dos toneladas de cocaína, según las investigaciones que realiza la Dirandro junto a la DEA.
Sin embargo, esta labor no es fácil pues los nueve integrantes del referido clan familiar– quienes fueron presentados ayer en conferencia de prensa– no están colaborando para capturar al resto de miembros de su organización. Ayer también se exhibieron las armas y autos que poseían.
Según Arévalo Guzmán, tales armas (dos de largo alcance y dos pistolas), eran usadas por los delincuentes cuando trasladaban la droga por distintos puntos de la ciudad para evitar que otros grupos dedicados al narcotráfico la roben.
El Clan Cerbellón se formó hace dos años, estableciendo sus principales contactos en Estados Unidos. Jorge Ignacio Cerbellón Aparicio, cabecilla del grupo criminal, tiene su domicilio registrado en la ciudad de Houston, en Texas.
La policía prevé que esta semana se capturen a otros miembros de esta organización delictiva. Los agentes están tras los pasos de cinco integrantes.
También se busca al financista del Clan Cerbellón, quien podría ser un ciudadano extranjero, y a la persona que sirvió como contacto del clan en las zonas de producción de la droga, a quien solo se le identifica como ‘Ángel’.
EL NUEVO FRENTE DEL NARCOTRÁFICO
Se ha determinado que la droga incautada llegó a manos del Clan Cerbellón desde el valle del Huallaga y la zona de Pichis Palcazu. Esta última está ubicada en el límite entre Huánuco y Cerro de Pasco.
Pichis Palcazu es considerado un nuevo frente consolidado de producción de hoja de coca y droga, sostuvo Carmen Masías, presidenta de Devida.
Masías informó que el año pasado se erradicaron 10.134 hectáreas de hoja de coca en esta zona, pero que aún quedan 6.000 ha.
Parte de la consolidación de Pichis Palcazu se explica por la erradicación realizada en los valles del Huallaga y porque próximo a esta zona se ubica el valle de los ríos Apurímac, Ene y Mantaro (Vraem), principal productor de hoja de coca del país y en donde se ha creado una red de pistas de aterrizaje clandestinas para el narcotráfico.