Charles Chaplin fue el cerebro detrás de algunas de las mejores películas de la historia del cine (mudo y sonoro); sin embargo, títulos como "Tiempos modernos", "Luces de la ciudad" o "El gran dictador" nunca fueron premiados por la Academia en las categorías de peso como "Mejor película", "Mejor actuación" o "Mejor director".
En 1972, la Academia intentó saldar esta deuda entregándole un segundo premio honorífico a Chaplin (el primero lo había recibido en 1929 por "El Circo"). En aquella época, Charles, de 83 años de edad, se había retirado del cine y exiliado en Suiza tras ser acusado de comunista.
El premio marcó su reencuentro con un país y una Academia que no lo había sabido valorar. El público presente, ante el ingreso de Chaplin, realizó la que hasta ahora es la ovación más prolongada en la historia de los premios: 12 minutos aplaudiendo de pie y efusivamente.
Recuerda aquí este momento histórico del Oscar: