El aniversario de bodas de Meghan Markle y el príncipe Harry ha traído consigo una serie de revelaciones sorprendentes gracias a Alexi Lubomirski, el fotógrafo encargado de capturar los momentos más icónicos de la boda real. A través de una serie de videos en TikTok, Lubomirski ha compartido detalles inéditos y anécdotas detrás de cámaras que pocos conocían.
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Entre las anécdotas compartidas, el fotógrafo reveló que, antes de ingresar al Castillo de Windsor para la boda, él y su esposa fueron advertidos con una indicación bastante peculiar.
A las puertas del castillo, guardias estaban apostados dando la instrucción clara a todos los invitados: “Damas y caballeros, por favor tengan cuidado con lo que se dicen porque el mundo puede leer los labios”.
Lubomirski recordó cómo muchos, al entrar, hablaban cubriéndose la boca para evitar que sus conversaciones fueran captadas y analizadas por las cámaras y periodistas presentes. “No saben de qué están hablando, pero todos en estas cámaras están mirando y leyendo los labios”, explicó.
Alexi Lubomirski, fotógrafo de la boda real, compartió detalles inéditos del gran día de Meghan y Harry. | Crédito: AFP
Lubomirski fue el responsable de tomar los retratos oficiales de Meghan y Harry, así como de sus familias, en el Castillo de Windsor justo después de la ceremonia. Para capturar la esencia de la familia real de manera más natural y menos rígida, pidió a algunos familiares que se sentaran mientras otros permanecían de pie, rompiendo con el protocolo usual de las fotos grupales.
Su truco para lograr sonrisas genuinas fue sacar a relucir los Smarties, los tradicionales dulces británicos, que sabía que agradarían especialmente a los niños presentes. Esa idea surgió tras escuchar a una niñera prometiendo esos dulces a los pequeños si se portaban bien durante la boda.
Alexi Lubomirski también compartió anécdotas emotivas y estrategias para lograr fotos naturales del histórico evento. | Crédito: AFP
Además de los retratos familiares, Lubomirski pudo capturar uno de los momentos más emotivos del día: cuando Harry y Meghan estaban solos y alejados de la multitud, relajándose y compartiendo un instante de calma tras la ceremonia.
“Había una sensación de alivio, belleza y alegría, y simplemente se desplomaron en las escaleras. Tomé esta foto en blanco y negro que se ha vuelto icónica”, relató.
El fotógrafo también recordó cómo recibió la llamada del Palacio de Kensington invitándolo a conocer a la pareja y posteriormente a tomar las fotos del compromiso. Inspirado por una imagen clásica de Audrey Hepburn y Mel Ferrer, propuso a Meghan y Harry una pose similar, donde él los capturó en un momento espontáneo y lleno de cariño que se volvió viral en redes sociales.
