Una historia que conmocionó a toda España a inicios de la década de los 80 fue llevada a la pantalla. Nos referimos a la miniserie “Asalto al Banco Central”, que narra lo ocurrido aquel 23 de mayo de 1981, fecha en la que un grupo de sujetos armados ingresó a la institución financiera y tomó como rehenes a más de 200 personas. Para conocer más sobre lo que pasó realmente ese día, sigue leyendo esta nota.
La serie, además de mostrar los pormenores del atraco, basándose en las declaraciones de los implicados y rehenes, seguirá a una periodista que trata de descubrir el verdadero motivo del atraco. ¿Realmente se trató de un simple robo?
UN ROBO QUE HIZO TEMBLAR ESPAÑA
La mañana de aquel sábado 23 de mayo de 1981, todo transcurría con normalidad en la plaza de Cataluña. Tras abrir sus puertas, los trabajadores del Banco Central de Barcelona comenzaron a atender al público que llegaba presuroso para realizar sus trámites; sin embargo, pronto la tranquilidad se vio interrumpida cuando once sujetos encapuchados y totalmente armados irrumpieron en dicha sede financiera.
A los pocos minutos, a las 9:23 a.m., la policía recibió el aviso anónimo de que el banco estaba siendo atracado. Cinco horas después, cerca de las 2:30 p.m., a los medios les informaban que en una de las cabinas de teléfono de la plaza había un comunicado, el cual fue recogido por periodistas del Diario de Barcelona, en el que se exigía a las autoridades dejar en libertad a “cuatro héroes del 23 de febrero y nuestro valiente teniente coronel Tejero”, además de disponer dos aviones en un plazo de 72 horas: uno para facilitar la salida de los cinco militares y el otro para el comando que estaba en el banco. Si no hacían caso a sus demandas, amenazaron con ejecutar a 10 rehenes de entrada y 5 cada hora.
Esto hizo que el Gobierno de España forme un gabinete de crisis en la sede del Banco de Bilbao, próximo al edificio tomado. En esa reunión se manejan algunas hipótesis sobre los captores, siendo la principal que todo es obra de la extrema derecha en la que estarían implicados algunos miembros de la Guardia Civil. Ante esta conjetura, a través de sus abogados, Tejero y José Ignacio San Martín señalaron que se oponían a cualquier intento por sacarlos. Entonces, ¿quiénes estaban detrás del asalto en realidad o sí era un atraco?
PERO ANTES ¿POR QUÉ DIJERON QUE ERA OBRA DE LA EXTREMA DERECHA?
La primera información que deslizó el gabinete en crisis sobre la toma del banco es que era obra de la extrema derecha que buscaba retornar al poder, esto porque exactamente tres meses antes, el 23 de febrero de 1981, hubo un intento de golpe de Estado a cargo de algunos mandos militares en España. Esto ocurrió en Madrid, a las 18:23 horas, cuando un numeroso grupo de guardias civiles, al mando del teniente coronel Antonio Tejero, asaltó el Palacio de las Cortes durante la votación para la investidura del candidato a la Presidencia del Gobierno, Leopoldo Calvo-Sotelo. En tanto, la ciudad de Valencia fue ocupada militarmente, por lo que dos mil hombres y cincuenta vehículos de combate fueron desplegados por las calles; esto gracias al estado de excepción proclamado por el teniente general Jaime Milans del Bosch.
El secuestro al Congreso concluyó a la 1:00 de la madrugada del 24 de febrero, después de que el rey Juan Carlos I, vestido con uniforme de capitán general de los Ejércitos, se dirigió a la nación por televisión rechazando a los golpistas y defendiendo la Constitución española.
ENTONCES, ¿EL ASALTO AL BANCO SÍ FUE COMETIDO POR UNA BANDA?
Para varios policías de Barcelona, sí se trataba de un asalto al Banco Central y estaban seguros de que los delincuentes formaban parte de una banda temeraria que no tenía miedo a nada ni nadie, por lo que estaban dispuestos a todo, así lo dio a conocer el periodista José Martí Gómez a fines de 2021, publica El País. El hombre de prensa falleció en febrero de 2022.
Se sabe que una vez dentro y ante la llegada de gran cantidad de efectivos policiales, que cercaron la zona, los asaltantes intentaron cavar un túnel en una pared del sótano para escapar, pero al usar su taladro se dieron con la sorpresa de que la pared de granito resultó ser demasiado dura.
¿BUSCABAN DESAPARECER DOCUMENTOS QUE COMPROMETÍAN AL REY?
José Juan Martínez Gómez, líder de los asaltantes conocido como “El rubio”, dijo en el Auditorio de Kursaal que en realidad se trató de un encargo de los servicios secretos, que les pidieron a cambio de dinero buscar un maletín con documentos que comprometían al Rey y varios políticos en el 23F, algo que repitió en otras ocasiones, pero sin mostrar pruebas.
Al respecto, uno de los delincuentes que formó parte del atraco identificado como Mariano B., que aquel momento tenía 21 años y ningún antecedente policial, desmintió a Martínez. “Lo que dice José Juan sobre los servicios secretos no es verdad. Ese tío es un fantástico que se cree sus propias mentiras”, dijo a El País.
NEGOCIACIONES Y FIN DEL SECUESTRO
Las negociaciones siguieron, pero cuando cayó la noche, el agotamiento y la tensión cada vez eran más fuertes. Al día siguiente, a las 6:00 a.m., un rehén sufre un ataque de histeria y le permiten irse en una ambulancia. A las 10:00 a.m., se envía una tanqueta militar con megáfono para enviar un mensaje a los asaltantes. En ese instante se da un fuego cruzado, pero todo se calma.
Con el paso de los minutos se producen más intercambio de rehenes, incluso uno de los delincuentes, protegido con un rehén, sale por los alrededores del banco. Ya en la tarde siguen las negociaciones, hasta que, a las 19:55 horas, un francotirador abate a uno de los captores que retenía a una de las personas cautivas en la azotea del edificio. Ante el nerviosismo de todos, personal del Grupo de Operaciones Especiales de la Policía entra por la azotea.
“El rubio” decide que los rehenes salgan y entre ellos se mezclen los delincuentes. La policía logró detener a nueve de los asaltantes. El saldo final de la operación: un muerto, un herido y la fuga de uno de los sujetos. Tras la intervención se comprobó que los individuos no tenían ninguna vinculación ni con la política ni con la Guardia Civil.
Fue así como después de 37 horas se acabó el atraco que hizo temblar a la democracia en España.
Periodista. Licenciada en Ciencias de la Comunicación por la Universidad Nacional del Centro del Perú (UNCP). Más de diez años de experiencia en periodismo. Actualmente se desempeña como redactora del Núcleo de Audiencias del Grupo El Comercio.