
El oeste de Oregón y Washington podría enfrentarse a una sorpresa poco común este miércoles: granizo de gran tamaño como resultado de varias tormentas eléctricas que se están desarrollando en la región. Aunque el granizo es un fenómeno más típico en el Medio Oeste y el Sur de Estados, el noroeste del Pacífico podría estar a punto de experimentar una tormenta que rompa récords. Los meteorólogos advierten que algunas piedras podrían alcanzar tamaños realmente impresionantes, desafiando las expectativas de una región donde este tipo de fenómeno es bastante raro.
¿QUÉ TAN GRANDE PODRÍA SER EL GRANIZO QUE CAERÍA EN OREGÓN Y WASHINGTON?
Según el Centro de predicción de Tormentas y el Servicio Meteorológico Nacional, cualquier tormenta eléctrica que produzca granizo de una pulgada de diámetro (2,54 cm) o más se clasifica como severa. Sin embargo, el pronóstico para hoy, 26 de marzo, es más alarmante: una o dos tormentas podrían generar granizo de entre 5 y 6,35 cm antes de debilitarse al cruzar las montañas Cascade. La zona de mayor riesgo se extiende a lo largo del corredor de la I-5, desde Eugene hasta Seattle, donde el granizo podría convertirse en la principal amenaza para residentes y conductores.
El granizo de gran tamaño no es precisamente un fenómeno típico en el noroeste del Pacífico. La región suele experimentar lluvias constantes y cielos grises, pero las tormentas eléctricas intensas y el granizo gigante son más comunes en las zonas de clima extremo del Medio Oeste y el Sur. Por eso, la posibilidad de granizo del tamaño de una pelota de golf en Oregón o Washington es suficiente para captar la atención de los meteorólogos y los residentes.

ANTECEDENTES DE GRANIZO EN OREGÓN
Para poner los pronósticos en contexto, el granizo más grande registrado en Oregón cayó el 9 de julio de 1995 en la ciudad de Condon, en el condado de Gilliam. Aquella piedra de hielo medía cuatro pulgadas de diámetro (aproximadamente el tamaño de una pelota de softbol) y fue el resultado de una tormenta supercelular que azotó el centro del estado. En enero de 2018, una tormenta en Seaside dejó caer granizo de hasta dos pulgadas de diámetro, estableciendo el récord para la parte occidental de Oregón.
Sin embargo, las cifras de Oregón palidecen en comparación con otros eventos extremos en Estados Unidos. En Vigo Park, Texas, en junio pasado, cayó una piedra de granizo del tamaño de una piña. Pero el récord absoluto sigue perteneciendo a Vivian, Dakota del Sur, donde en 2010 se registró una piedra de granizo de 28 cm de diámetro, más grande que una pelota de voleibol y con un peso de casi 900 gramos.

La clave para estas tormentas intensas está en la combinación de aire cálido y húmedo, junto con fuertes corrientes ascendentes que permiten que las piedras de granizo crezcan a tamaños inusuales antes de caer a la tierra. El noroeste del Pacífico no suele contar con estas condiciones, lo que hace que el pronóstico de mañana sea aún más excepcional.
Los expertos recomiendan a los residentes de la zona estar preparados. Es importante proteger los vehículos en garajes o áreas cubiertas, asegurar los objetos exteriores y mantenerse alejado de las ventanas durante la tormenta. También se aconseja seguir las alertas meteorológicas en tiempo real y evitar salir a la carretera si las condiciones empeoran.











