El gobernador de Florida, RonDeSantis, puso fin a meses de expectativas e incertidumbre y finalmente confirmó que bucará la nominación del Partido Republicano rumbo a la Casa Blanca. El anuncio no solo calienta la campaña de las elecciones primarias, sino que es un claro desafío a su expadrino político, Donald Trump, quien ya ha presentado su candidatura y es el favorito de las encuestas para vencer en el bloque conservador.
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DeSantis es, sin embargo, “el rival republicano más formidable” al que Trump se ha enfrentado desde su ascenso a la política estadounidense en el 2016, según “The New York Times”.
El gobernador de Florida de 44 años formalizó su candidatura en un documento entregado a la comisión electoral federal. Aunque se esperaba que el lanzamiento mediático de su campaña se diera en una conversación en Twitter con Elon Musk, problemas técnicos empañaron el evento.
“Soy Ron DeSantis y me presento a presidente para liderar nuestro gran regreso estadounidense”, dijo el republicano, finalmente, en un video publicado en Twitter.
I’m running for president to lead our Great American Comeback. pic.twitter.com/YmkWkLaVDg
— Ron DeSantis (@RonDeSantis) May 24, 2023
Su anuncio marca un nuevo momento para el Partido Republicano, en el que muchos buscan una alternativa con posibilidades de hacerle la pelea a Trump. El expresidente de 76 años, que perdió en los comicios del 2020, representa un lastre para el ala conservadora más tradicional, que no le perdona que siga defendiendo falsamente haber sido víctima de una elección robada.
Según CNN, Trump estaba por delante de DeSantis en las escuestas por unos 10 puntos a nivel nacional a fines del 2022, mientras que hoy el expresidente tiene un promedio de más del 50% a nivel nacional entre los votantes republicanos y el gobernador de Florida ha caído a los veintitantos. Ningún otro nombre del partido llega a los dos dígitos.
Quien venza en el partido conservador se enfrentará en noviembre del 2024 al candidato elegido por el Partido Demócrata, que muy probablemente sea el actual presidente Joe Biden.
¿Choque con Trump?
Es claro que para DeSantis uno de los retos más urgentes es distanciarse de Trump, algo en lo que ha estado trabajando, pese a desatar el enojo del magnate, a quien llegó a considerar su padrino político.
Antes de ser obtener el mayor puesto político de Florida, DeSantis era un congresista casi desconocido que había trabajado como abogado de la Marina. En el 2018, ganó las elecciones a gobernador tras contar con el respaldo decisivo de Trump, quien ya era presidente.
Los demás candidatos declarados en la carrera republicana -Nikki Haley, Tim Scott, Asa Hutchinson- superan rara vez el 5% de las intenciones de voto en las encuestas.
Aunque DeSantis recibió con agrado la bendición del magnate -incluso llegó a ser apodado ‘mini Trump’, sus diferencias fueron haciéndose más evidentes con el tiempo. En los últimos meses no han faltado los ataques cruzados, especialmente desde que se hizo evidente que DeSantis era la mayor amenaza para Trump dentro del Partido Republicano.
Aunque se ha quedado muy por detrás de Trump en las encuestas de los últimos meses, “The New York Times” afirma que DeSantis conserva una gran cantidad de fortalezas. “Tiene una montaña de dinero en efectivo, una sólida operación de campaña y una serie de victorias políticas conservadoras en Florida después de un triunfo aplastante en la reelección el otoño pasado”, dice el medio en referencia a las elecciones de noviembre pasado en las que DeSantis mantuvo su cargo como gobernador con contundencia.
¿Tiene DeSantis opciones reales para frenar a Trump? Es muy prematuro para saberlo. Sin embargo, Eduardo Gamarra, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Internacional de Florida, explica que es clave entender que hay dos momentos crucialmente distintos en la campaña para el gobernador republicano.
“En las primarias republicanas DeSantis tiene que ser un personaje de la derecha extrema y se va a presionar para ser el candidato de la derecha más radical, más trumpista. Si logra vencer a Trump, ese discurso le va a significar un problema mayor en el momento de una elección nacional”, dice el experto.
Otro problema para DeSantis es que no es una persona carismática. “Es alguien que emite arrogancia cuando se presenta en público y eso cae bien en algunos sectores, pero nacionalmente lo va a afectar mucho. Él es muy arrogante, al final de cuentas, es un populista que ha estudiado en Yale y Harvard. En cambio, Trump es apoyado en varios sectores, es un tipo que sea ha identificado con las masas. El populismo de Trump es genuino, el populismo de de DeDantis no lo es”, opina Gamarra.
“DeSantis necesita desesperadamente un injerto de personalidad”, se burló Trump este miércoles. Está claro que la campaña entre el exmandatario y el gobernador será inclemente.
Medidas polémicas
Con la esperanza de representar la nueva guardia del Partido Republicano, DeSantis ha impulsado políticas muy conservadoras en temas como la educación, el aborto o la inmigración.
Steve Contorno, periodista de CNN experto en Florida, ha señalado que DeSantis ha construido una plataforma desde la que puede lanzarse.
“Y gracias a su popularidad dentro del partido, los legisladores republicanos siguen su agenda. Esto incluye la prohibición del aborto de seis semanas, la eliminación de los permisos para portar armas en público, la represión de la inmigración ilegal y nuevas restricciones que alterarán la vida de las personas transgénero”, afirma.
Gamarra añade que el gobbernador ha implementado en algunas políticas bastante complicadas y polémicas desde el punto de vista de la libertad de expresión académica.
“Básicamente nos ha dicho qué es lo que podemos enseñar, se están censurando libros para las escuelas públicas. Hay un tema de gran intolerancia. También está su pelea contra Disney. Jamás se hubiera pensado en un republicano atacando a una empresa transnacional. El mismo Trump ha criticado a DeSantis por eso. También está su postura sobre migración, en Florida puede ser aceptado, pero a nivel nacional no va a trascender”, dice el analista.
Eduardo Gamarra
Profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Internacional de Florida
- ¿Qué posibilidades reales tiene DeSantis frente a Donald Trump?
Las elecciones son impredecibles. No sabemos, por ejemplo, el impacto que van a tener todos los juicios a Donald Trump y si es que, efectivamente, Trump llegara a ser el candidato republicano. Mucho puede cambiar. En este momento Trump es el dueño y señor del Partido Republicano, aparentemente controla la base y la maquinaria del partido, tiene un movimiento muy fuerte y las encuestas lo reflejan.
- ¿En qué posición se encuentra DeSantis en este momento?
DeSantis parece haber hecho algunas cosas que no le han favorecido. Por ejemplo, las leyes que ha aprobado en Florida de una manera abrumadora, porque controla el Parlamento, han hecho que se genere una resistencia que quizás él no anticipaba. La semana pasada, por ejemplo, su candidato por la alcaldía de Jacksonville perdió y no por poco. Parece que DeSantis ha cometido errores que están minando un poco su apoyo.
- ¿Cómo ve sus opciones a nivel nacional?
La agenda de DeSantis no es solo conservadora, sino es una agenda de la derecha extrema. Él está tratando de ser más derechista que Donald Trump en muchas cosas. En caso de que DeSantis llegue a ser el candidato del Partido Republicano le sería difícil ganar la elección nacional con esa agenda, que, paradójicamente, es la que necesita para ganar las primarias. Él tiene que ser más conservador que Trump para poder ganar las primarias.
- ¿Cree que DeSantis ha logrado desmarcarse de la imagen que tenía de ser una especie de eco de Donald Trump?
Pues lo ha intentado y lo ha intentado con con mucha fuerza y ha practicado muchísimo como diferenciarse de Trump, quien sigue diciendo que DeSantis es un malagradecido y que fue él el que creó a DeSantis. Mi impresión es que DeSantis no ha logrado de manera decisiva salir de esa de esa imagen de ser simplemente un mini Trump, alguien que intenta a hacer todo lo que hace Trump o ir incluso un poco más allá. Yo creo que dentro del Partido Republicano están diciendo ‘bueno, si voy a votar por el trumpismo votaré directamente por Donald Trump y no por una imitación’.