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En sus primeras palabras como flamante presidenta del Congreso, Ana María Solórzano Flores, aseguró que en su gestión, que durará hasta julio del próximo año, se respetará la separación de poderes y la independencia del Poder Legislativo.
"Seré respetuosa del principio de separación de poderes. Es importante garantizar el principio de independencia", dijo Solórzano, de 37 años, frente a los 122 congresistas que participaron en la elección de la nueva Mesa Directiva.
Esta candidatura, como se recuerda, despertó duras críticas tanto de la oposición como la de algunos miembros de su agrupación política, que incluso decidieron renunciar a su bancada al considerarla una imposición de Nadine Heredia, presidenta del nacionalismo.
"Asumo este cargo con entusiasmo y consciente de la gran responsabilidad que implica. Sabré hacer honor a la investidura. Van a encontrarán en mí a la presidenta de los 130 congresistas, sin distinción de colores y dispuesta a escuchar", dijo Solórzano.
La nacionalista sostuvo que esta Mesa Directiva dará prioridad a fortalecer los controles de gastos en los gobiernos regionales y municipales, así como la lucha anticorrupción y la seguridad.
Al respecto, señaló que se dará especial énfasis en las iniciativas que plantean combatir la violencia a la mujer y la desigualdad. Anunció, de ese modo, que convocará a plenos especiales para que sean debatidos los dictámenes referentes a estos temas.
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