Fernando Vivas

Un día de diciembre del año pasado, Elvis Vergara, congresista por Ucayali y portavoz de Acción Popular (AP) junto a Raúl Doroteo, su colega por Ica; se pasearon por el despacho presidencial, como si visitaran una propiedad de la que fueran, de alguna forma, accionistas. Un trabajador del despacho me contó que le impresionó lo orondos y curiosos que se les veía, indagando por cómo funcionaba el gobierno, como si proyectaran mentalmente todo lo que podían a hacer en un inmenso parque de juegos.