Diciembre del 2015 fue el mes más lluvioso en Reino Unido desde que comenzaron los registros hace más de un siglo, según datos difundidos por la Oficina Meteorológica británica (Met Office).
El último mes del año pasado fue también el mes más caluroso desde al menos 1910, al haber alcanzado las temperaturas una media de 7,9 grados, 4,1 más que la registrada entre 1981 y el 2010.
Las precipitaciones dejaron 230 litros por metro cuadrado, casi el doble de lluvia que la que se recogió entre 1981 y el 2010, período que el Met Office usa de referencia y en el que se llegó a los 120 litros por metro cuadrado.
Sin embargo, el 2015 no fue el año más caluroso en Reino Unido, dado que no superó los 9,9 grados que se alcanzaron en el 2014. Además, el año pasado se ha convertido en el sexto más lluvioso desde que se tienen datos.
El Met Office apuntó que las tormentas Desmond, Eva y Frank, que dejaron inundaciones en gran parte de Escocia, Gales y el norte de Inglaterra, son las culpables de que en diciembre se batieran todos los récords de lluvia.
Respecto a las temperaturas, los elevados registros del pasado mes, que serían los típicos durante abril o mayo, dieron lugar a un diciembre menos frío de lo esperado.
El promedio durante 1981 y el 2010 marca 11 días de viento helado durante diciembre, mientras que en las últimas semanas del año pasado solo hubo tres días de frío.
Los expertos coinciden en que estos cambios basados en altas temperaturas y recurrentes precipitaciones se deben al cambio climático.
Este hecho no ha sorprendido a científicos y meteorólogos puesto que, como predijeron desde la década de 1990, un calentamiento global implicaría inviernos más cálidos y más lluviosos en Reino Unido, y tormentas más intensas.
Por ello, señalaron que la llegada de Desmond al noreste de Inglaterra -en concreto a la región de Cumbria- se debe en un 40% al cambio climático.
Desde la Universidad de Edimburgo, el profesor David Reay sostuvo que el pasado mes evidenció que Reino Unido aún no está preparado para afrontar catástrofes como inundaciones.
Los científicos que aconsejan al Gobierno del primer ministro David Cameron han advertido de que el aumento de las inundaciones será el principal reto derivado del cambio climático al que Reino Unido debe hacer frente.
El presupuesto anual para prevenir los daños causados por estas catástrofes naturales se recortó en el período 2011-12 hasta que se recuperó de nuevo en 2014-15.
Cameron prometió el pasado domingo 40 millones de libras (58,9 millones de dólares) para reparar los destrozos causados por las recientes inundaciones en Inglaterra.
Hoy, todavía hay 21 alertas en Inglaterra y Gales por precipitaciones que pueden derivar en inundaciones.
Fuente: EFE