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"Game of Thrones" ha mostrado el destino de uno de los personajes más odiados en la saga. Durante el último capítulo de la séptima temporada, Lord Petyr Baelish, más conocido como Littlefinger, ha tenido que enfrentar las consecuencias de sus acciones pasadas. ALERTA DE SPOILER.
En la segunda parte del episodio final de temporada de "Game of Thrones" se mostró a Littlefinger elucubrando una intriga para que Sansa Stark se quede con el dominio de Winterfell. De fondo subyace la otra razón: obviamente Litlefinger quiere acceder al poder casándose luego con ella.
Sin embargo, en un diálogo posterior, delante de los notables de Winterfell, Sansa acusó a Littlefinger de haber iniciado la sangrienta guerra entre los Lannister y los Stark, que es lo que inicia, básicamente, la saga de "Game of Thrones".
Lo increíble sucede y Littlefinger cae de rodillas suplicando piedad y justificando sus actos, asegurando que lo hizo por amor a la madre de los Stark y a Sansa. Sin embargo, todos quedan de una sola pieza cuando, sin mayor preámbulo, Arya le corta el cuello con la misma daga que Littlefinger usó como prueba para que Catelyn Stark, crea que fue Tyrion Lannister quien estuvo detrás del ataque contra Bran.
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Littlefinger cae de rodillas pidiendo piedad, sin saber que casi de inmediato afrontaría su destino en Game of Thrones.
La escena terminó con el cuerpo de Lord Baelish en el suelo, mientras las hermanas Stark observaban cómo se hacía realidad lo que Sansa le dijo a Littlefinger antes de su deceso: "Tú me dijiste que no había justicia en este mundo y que teníamos que fabricarla". Este ha sido quizás uno de los momentos más esperados de "Game of Thrones".
