En todo el mundo hay lugares llenos de misterio capaces de atemorizar hasta el más valiente. Uno de ellos es el Hotel del Salto a las afueras de San Antonio de Tequendama en Colombia pues no solo se encuentra alejado de todo en medio de la naturaleza, sino que se dice que está encantado.
El hotel abandonado está en el borde de un abismo y tiene una envidiable vista del Salto de Tequendama, una cascada natural de 157 metros que cae justo frente a él. Los motivos por los cuales el hotel fue abandonado son un misterio. Algunos afirman que está embrujado por el alma de las personas que se suicidaban lanzándose al vació mientras que otros aseguran que lo causó la contaminación del río Bogotá.
Desde su inauguración en 1924, el hotel era visitado por la élite colombiana debido a su ubicación y a lo elegante de su construcción. Luego de décadas de permanecer en el olvido, un grupo de arquitectos inició el trabajo de renovación para convertirlo en lo que hoy es la Casa Museo Salto de Tequendama Biodiversidad y Cultura para concientizar acerca de la conservación y cuidado de la naturaleza de la zona.