Corría el año 2013, cuando un grupo de amigos decidió construir un globo meteorológico para poder instalarle una cámara en el interior y mandarlo al espacio. El aparato partió desde Tuba City, Arizona.
Todo funcionó bien, pues se logró registrar el paisaje desértico de Arizona y el Gran Cañón. Sin embargo, la cámara no aterrizó donde los jóvenes habían planeado y ellos pensaron que el proyecto había fracasado.
(Foto: Shutterstock)
Dos años después, alguien encontró el teléfono por accidente y llegó a manos de los jóvenes, quienes dieron a conocer al mundo las sorprendentes imágenes del Gran Cañón grabado a 30 kilómetros de altura.
El video tiene una duración de un poco más de cuatro minutos y muestra el proceso del armado del aparato, así como su recorrido por los cielos de Arizona. Se encuentra en Youtube y ya cuenta con más de dos millones de visitas.