Por los niños de Marco, Junín.
El colegio Toribio Rodríguez de Mendoza del distrito de Marco, en la provincia de Jauja, solo tiene 72 alumnos sumados los cinco grados de educación secundaria. El éxodo de habitantes que aqueja al distrito deja su huella en su primer colegio secundario.
Inaugurado el 24 de junio de 1964 como colegio de varones, luego se convirtió en mixto.
Su historia está llena de gloria, pues sus alumnos destacan en la región tanto en conocimientos como en arte. Son campeones en los juegos florales y en los concursos de danza y de bandas de música. Es también gracias a ellos que Marco se considera la segunda capital folclórica del Perú.
Sin embargo, sus amplios ambientes están mustios no solo por el poco alumnado sino por la falta de insumos en sus destartalados laboratorios de física y química; de implementos para las clases de teatro, música y danza así como por la falta de mantenimiento y hasta de un cerco.
Presupuesto exiguo
El alcalde distrital Hernán Arias revela que han elaborado un perfil técnico que será presentado al Foniprel en los próximos días para mejorar los ambientes del colegio.
El director del centro educativo, Mauro Mercado, plantea construir un coliseo cerrado y un aula multiusos.
Si logran su objetivo, se podría detener el éxodo de alumnos y de habitantes, que hoy son 2.047 y en 1979 eran más de 4.000.
La falta de agua y desagüe en el distrito es la razón principal de esta retirada, según el alcalde, que cuenta con menos del 40% de un presupuesto de 30.000 soles mensuales, porque el resto se va en gastos corrientes.
Texto: Eldy FloresTello /Enviada especial.
Fotos: Christian Ugarte / Enviado especial.