Las alergias
Foto: Ojo rojo por alergia, por Inkyhack
Con el debido perdón de las personas que sufren de alergias, una de las materias más “interesantes” de la medicina es el estudio del mecanismo por el cual se produce el fenómeno alérgico. Les confieso que quedé tan fascinado con el curso de inmunología en la facultad de medicina que por mucho tiempo quise dedicarme a la especialidad de inmunología y alergias.
No se puede entender el fenómeno alérgico si no se tiene primero un concepto básico de lo que es el sistema inmunológico.El sistema inmunológico es el que nos defiende de las muchas sustancias y microbios que están constantemente amenazando a nuestro organismo. Dichas “amenazas” se encuentran en el aire que respiramos, los alimentos que consumimos y en todas las cosas que tocamos. El sistema inmunológico está constituido básicamente de dos elementos: las células de la defensa y los anticuerpos, sustancias producidas por esas células y que pueden compararse a misiles teledirigidos de altísima sofisticación. Estos anticuerpos son en realidad sustancias llamadas inmunoglobulinas, las que se abrevian Ig.
Pongamos un ejemplo, una persona está en el micro y alguien con tuberculosis está viajando a su lado tosiendo de rato en rato. Los microbios de la TBC (los famosos Bacilos de Koch) se esparcen en el aire y la persona sana los respira e introduce en sus vías respiratorias.
Apenas llegan los microbios a la nariz y los bronquios, los linfocitos (unas células muy inteligentes y parte del sistema de defensa) se acercan y empiezan a “reconocerlas”. Ese paso es muy importante porque en respuesta a ese “reconocimiento” el linfocito produce anticuerpos (inmunoglobulinas) muy específicos, tan específicos que solo sirven contra los microbios de la tuberculosis pero no para otro tipo de microbios.
Sin querer confundirlos, quiero decirles que, de acuerdo a su función, las inmunoglobulinas se clasifican en cinco tipos: IgA, IgG, IgD, IgE e IgM. La que nos interesa para explicar las alergias es la Inmunoglobulina E (IgE).
Cuando una sustancia que causa una alergia (llamada alergeno) ingresa al cuerpo por primera vez, no pasa nada. Esa sustancia es “reconocida” por el linfocito, el cual elabora enormes cantidades de inmunoglobulinas E contra ese alergeno específico. Lo interesante es que toda esa IgE se “pega” a unas células muy especiales con un nombre muy extraño: célula cebada o mastocito. Esta célula cebada, llamada así por ser “gorda y rechoncha” (como al animal al que se le ceba para engordarlo) está rellena de gránulos de sustancias químicas, entre las que destaca la histamina, la que, como veremos después, es la causante de todo el problema de las alergias. Es por eso que a la célula cebada se le llama también la célula de las alergias.
El problema ocurre cuando el alergeno entra al cuerpo por segunda vez. En ese momento ocurre un fenómeno muy interesante. Los anticuerpos IgE “pegados” a la superficie de las células cebadas se dan cuenta que el alergeno ha entrado al cuerpo y reaccionan “reventando” a las células cebadas. Al “reventar” las células cebadas, los gránulos de histamina y otros químicos se “derraman” en la sangre y los tejidos, produciendo el llamado fenómeno inflamatorio, el que se manifiesta con los síntomas de la alergia, los cuales pueden ser tan graves que pueden causar la muerte del paciente.
Esa histamina causa los ojos rojos y llorosos, los estornudos y catarros, la fastidiosa carraspera en la garganta, el cierre de los bronquios o asma, la tos constante y las ronchas en la piel.
No se sabe muy bien por qué algunas personas desarrollan alergia y otras no, parece que el factor hereditario es muy importante. Si uno de los padres es alérgico, el niño tienen 48% de riesgo de ser alérgico también. Ese riesgo se eleva a 70% si ambos padres son alérgicos.
TIPOS DE ALERGIAS
Si bien es cierto el fenómeno alérgico que hemos descrito es común para todas las alergias, los síntomas pueden cambiar de acuerdo a las sustancias químicas liberadas por las células cebadas “reventadas” y el lugar en las que estas actúan. Cuando una persona tiene alergias, las preguntas fundamentales que deben hacerse son: ¿A qué alergenos estoy reaccionando? y ¿Dónde y en qué cantidad me estoy exponiendo?
Las alergias más comunes son:
• Rinitis alérgica: producida cuando los alergenos se concentran en la nariz. Causan estornudos, catarro constante, picazón y tupimiento de la nariz, frecuentemente asociado a ojos rojos y llorosos. Pueden complicarse con infecciones de los senos paranasales (sinusitis) o de los oídos (otitis media).
• Conjuntivitis alérgica, en la que la alergia afecta a los ojos que están constantemente rojos, llorosos y con mucha picazón.
• Asma, grave tipo de alergia en la que la histamina y los otros químicos producen inflamación de los pequeños bronquios, los cuales se cierran, provocando la característica falta de aire. Muy asociada a la rinitis alérgica, calculándose que 78% de las personas con asma tienen también rinitis alérgica.
• Dermatitis atópica o eczema, en la que se produce picazón y enrojecimiento de la piel, la que con el continuo rascado se agrava produciéndose escamas y pelamiento de la piel. La dermatitis atópica generalmente empieza en la infancia, calculándose que 50% de los niños con eczema van a desarrollar asma en el futuro.
• Urticaria o ronchas, muy comunes como reacción alérgica a ciertos alimentos como el maní, tomates, mariscos y pescados; o a medicamentos como la penicilina, las sulfas, el fenobarbital, la aspirina y medicamentos contra la epilepsia.
• Anafilaxia o grave reacción alérgica, generalmente asociada a alergias a alimentos, picadura de insectos o medicamentos y antibióticos. Sin una pronta atención, una persona que desarrolla anafilaxia puede morir. En la anafilaxia, se hincha todo el cuerpo, se cierran la laringe y los bronquios y se afectan varios órganos. Algunos síntomas iniciales pueden incluir una sensación de calentura en el cuerpo, enrojecimiento y congestión de la piel y un raro adormecimiento de la boca. También se pueden presentar mareos, falta de aire, ansiedad, y vómitos o diarreas. En casos severos, la presión arterial disminuye intensamente y el paciente se desmaya y si no es prontamente atendido desarrolla el llamado choque anafiláctico. Si el paciente no recibe inmediatamente tratamiento con adrenalina, el paciente puede morir.
Las alergias no tienen curación, la única manera de que no se presenten es evitar contacto con la o las sustancias que la provocan, las cuales son de una enorme variedad. Una vez presentes, el tratamiento de las alergias sencillas puede ser hecha por el médico general usando los famosos antihistamínicos (ahora entendemos por qué se llaman así), los cuales pueden combinarse con otros medicamentos a criterio del medico. Existen muchos tipos de antihistamínicos, los cuales se dividen en los de “vieja generación” y “nueva generación”; la diferencia esta en lo específico del medicamento y la presencia o no de somnolencia como efecto secundario principal.
Las cortisonas o corticoesteroides son medicamentos muy efectivos en las alergias, pero NUNCA deben usarse sin una prescripción facultativa por los severos efectos secundarios que su uso puede producir. Los casos más complejos pueden requerir la consulta con un medico especialista en alergias e inmunología.
Si una persona es alérgica a una medicina, se aconseja que use unos brazaletes o collares especiales en los que se ponen unas pequeñas placas inscritas con el nombre de la medicina a la cual se es alérgico. Eso es muy útil si la persona llega inconsciente a un hospital.
Lo siento mucho pero este blog ha sido creado para comentar e intercambiar opiniones relacionadas al tema del post. El Internet no es un buen método para absolver consultas médicas específicas. Solo el médico tratante puede resolver problemas médicos personales. Espero sepa comprender. Gracias.
ADDENDUM 15 de Abril, 2009.
Por ser muy parecidos, muchas personas (y doctores) confunden los síntomas de las alergias con los síntomas de irritación de las vías respiratorias producidas por la contaminación ambiental. Este otro post hace un resumen de los varios tipos de partículas existentes en el aire contaminado y que irritan las vías respiratorias, piel y ojos.
http://blogs.elcomercio.com.pe/cuidatusalud/2008/09/enfermedades-del-corazon-por-c.html