¡Adiós, maestro!
Por Gonzalo Tello (Ópera Perú)
En una época en que los divos y divas se han extinguido, el barítono Dmitri Hvorostovsky reflejaba no solo una de las voces mas bellas y poderosas de nuestro tiempo, sino además un encanto y sofisticación que recordaba a los grandes de antaño.
Hvorostovsky, en mas de 20 años de carrera, encantó desde su famosa victoria (sobre Bryn Terfel) en el Concurso lírico de Cardiff y demostró gran talento nato en presentaciones alrededor del mundo. Tanto sus roles de ópera rusa como los roles verdianos, en los que se convirtió en el mejor intérprete de hoy, notaban una estela de brillantez e impacto. En efecto, ver a Hvorostovsky en escena era ver a toda una estrella, con la expectación que esto acarrea.
La primera vez que lo vi fue con mucha expectativa en el Met. Un reparto importante ponía en escena la producción antigua de “Don Carlo” de Verdi. Dimitri, junto a grandes como Pape, Borodina, Racette, el desaparecido Johan Botha y el legendario Samuel Ramey, con Levine en el podio, no pudo ser una mejor experiencia. Luego vendrían rendiciones de “Evgeny Onegin” junto a Renée Fleming en funciones totalmente agotadas, y, gracias a las transmisiones en HD, pudimos seguir viéndolo en brillantes interpretaciones en “Un ballo in maschera”, “Ernani”, “La traviata” o “Il trovatore”, y una memorable producción junto a Anna Netrebko.
Hace algunas semanas, a través del Instagram de un amigo cantante en común, y de algunas voces reconocidas pronunciándose por su “muerte”, el mundo del arte entró en shock con lo que después fue desmentido a través de las redes por su esposa Florence y su agente. Evidentemente, esta falsa noticia demostró el arraigo y popularidad del cantante, el cual despertó y consternó a muchas personas, viralizando la noticia rápidamente.
Debido a esa falsa información, y celebrando su vida y lucha, programamos este mes en Radio Filarmonía un pequeño homenaje al cantante que luchaba con fuerza y mucho buen humor contra el cáncer cerebral que lo alejó de los escenarios desde el 2016. Escuchamos “Simon Boccanegra” y “Rigoletto”, precisamente su último lanzamiento discográfico lanzado el 10 de noviembre. Este miércoles amanecimos con la trágica noticia de su partida.
Dmitri Hvorostovsky quedará en el recuerdo como uno de los grandes barítonos de la historia, y, como dijimos al inicio, de un artista y hombre extraordinario, que destaca en un mundo lírico en que los divos y divas se han extinguido por completo.
Descanse en paz, maestro.