Fuchs y aquel interminable romance argentino
A Nicolás, en Córdoba, por estos días lo miran con desconfianza. Ya no es el peruano, con apellido raro, que llegaba a probar suerte. Ya no es el turista deportivo que los medios ignoraban en el parque de asistencia. Este Fuchs llega tras la estupenda temporada en la Copa de Producción del 2013 en el WRC y con la moral al tope tras ganar la primera fecha del Campeonato Argentino disputada en Villa Carlos Paz, epicentro de la fecha mundialista de este fin de semana, frente a los locales más pintados.
Fuchs, actual líder del campeonato argentino de rally, parte así como uno de los grandes candidatos para este fin de semana en la categoría WRC2. Conoce la prueba, corre con un navegante con el que ha logrado mimetizarse y posee un auto de punta. ¿En contra? Aún no tiene muchos kilómetros sobre el Ford y esto podría jugarle en contra frente a rivales como Nasser Al-Attiyah, Ott Tanak, Jari Ketomaa y Yuriy Protasov. La apuesta es complicado pero la cancha está pintada para una jornada linda.
La historia de Nico con la fecha WRC de Argentina es por demás alentadora. En el 2009 cuando debutó, sin previamente haber ido a la prueba siquiera como espectador, terminó cuarto. En el 2012 consiguió su primer podio gaucho subiendo al segundo puesto y en el 2013 ganó en la categoría de Autos de Producción. Cada vez que ha corrido ha sido protagonista.
“Siempre disputar el Rally Argentina es un gran reto porque nos presenta muy buenos caminos, pero que implican el máximo esfuerzo por la gran cantidad de excelentes competidores que hay en carrera. Pilotos de la talla de Ott Tanak, Nasser Al Attiyah, Jari Ketomaa y el líder de la clasificación Yuriy Protasov son la clara muestra de lo competitivo que será este rally, muchos de ellos con vasta experiencia en la categoría máxima (WRC) que buscarán ganar el certamen desde el inicio”, admite Nicolás Fuchs desde Córdoba tras las pasadas de reconocimiento.
Se viene Argentina, el rally Mundial más peruano del calendario, y es imposible no dejarse llevar por la arritmia emotiva que nos invade cada vez que uno de los nuestros mira con deseo ese podio que ya en su ocasión conquistó Ferreyros y hace poco nomás el mismo Fuchs. ¡Vamos Perú!