Un club a la deriva
La locura se ha instalado en el club. Desde hace algunas horas -escribo este texto a las 8:27 p.m. del martes 15- tenemos nuevos directivos. Acompañados por policías, la junta transitoria que encabeza Eduardo Guinea tomó el mando de la institución y anunció elecciones para el 3 de julio, todo esto en vísperas del encuentro ante Sporting Cristal en el San Martín.No intentaré desentrañar el enredo legal en que se encuentra la crema; no vale la pena. Es más, que no les sorprenda si mañana otra medida cautelar le da la razón a la directiva defenestrada y en unos días aparece otra que contradiga la anterior. ¿Qué pensarán los jugadores, el cuerpo técnico? ¿qué dirán los trabajadores a quienes se les adeuda sus sueldos y beneficios sociales? ¿qué empresa seria querrá invertir en un club que un día tiene un presidente, dos semanas más tarde otro y poco tiempo después uno distinto? Somos una vergüenza, un mal chiste, una broma de pésimo gusto, un amago de institución. Nuestros rivales deben estar desternillándose de risa.
En la entrevista que me concedió, Jaime León decía que la junta transitoria no existía, que no veía posibilidades de ser desembarcado. Sus asesores legales se equivocaron de cabo a rabo.
¡Ah! Esta tarde jugamos ante Cristal.
Sobre la toma del club pueden leer más aquí o aquí.
¿Qué piensan de esta nueva vuelta de tuerca? ¿qué creen que debe ocurrir para acabar con estos problemas?
Un abrazo para todos.